
DAX
17:45:00
9.632,52

-368,44pts
El banco central alemán, símbolo la vertiginosa recuperación económica de la Alemania Occidental tras la II Guerra Mundial, celebrará mañana su 50 aniversario. Jacques Delors, que entonces era presidente de la Comisión Europea (CE), afirmó en 1992 que "no todos los alemanes creen en Dios, pero todos creen en el Bundesbank".
Con motivo del cumpleaños, Karl Otto Pöhl, presidente del Bundesbank entre 1980 y 1991, recordaba recientemente en el diario Frankfurter Allgemeine Zeitung con las palabras de Delors el estatus de culto de esta entidad monetaria, que es símbolo del llamado 'milagro alemán'.
Celebración pospuesta
El 1 de agosto de 1957 nació el Bundesbank como banco central de la República Federal Alemana (RFA), con el objetivo principal de preservar la estabilidad del marco alemán al margen de los dictados de los poderes políticos.
Mañana, los empleados del Bundesbank irán a trabajar como cualquier otro día ya que la celebración del cumpleaños ha sido pospuesta a septiembre debido a que no entraba ahora en la agenda de la canciller alemana, Angela Merkel.
Sin embargo, el próximo 17 de agosto el Bundesbank presentará en su sede central en Fráncfort una nueva moneda conmemorativa de diez euros para coleccionistas, que no estará en circulación.
Hasta la creación en 1999 del BCE, cuya sede también está en Fráncfort, el Bundesbank era el segundo banco central del mundo después de la Reserva Federal estadounidense y el marco, la segunda divisa después del dólar.
Ejemplo a seguir
La independencia de la institución y su tenaz defensa de la estabilidad de precios, dos de las características del quehacer del Bundesbank que la institución traspasó al BCE, impulsaron la divisa germana y protegieron el poder adquisitivo de los alemanes en los años 60 y 70 ya que en el periodo de entre guerras y en la II Guerra Mundial habían sufrido una hiperinflación.
"El Bundesbank ya no es el banco central cuya política monetaria debían seguir otras entidades emisoras europeas si no querían que se debilitase su divisa", reconoce la propia institución, que resalta, no obstante, que aún desempeña tareas relevantes como parte del Eurosistema.
La fortaleza del marco, que fue hasta su sustitución por el euro la segunda divisa más utilizada en los mercados financieros como reserva y depósito, representaba también, al igual que el Bundesbank, el milagro germano.
Por ello, los alemanes han sido hasta ahora tan desconfiados con la divisa europea, según Pöhl, quien también consideró que para vencer esta barrera serán necesarios nuevos avances en el proceso de integración de Europa, así como que el BCE lleve a cabo "una política monetaria consecuente y convincente".
Competencias actuales
Desde 1999, cuando cedió sus competencias en política monetaria, el presidente del Bundesbank forma parte del consejo de gobierno del BCE de igual modo que los otros gobernadores de los bancos centrales de la Unión Económica y Monetaria (UEM), y participa así en las decisiones sobre los tipos de interés.
El actual presidente del Bundesbank, Axel Weber, opina que el banco germano aún tiene "importantes tareas operativas" como parte del Eurosistema, entre las que destacó la labor de reconocer antes de tiempo los riesgos para la estabilidad financiera y monetaria.
Como a los trece bancos centrales de los países de la zona del euro, al Bundesbank le compete actualmente la aplicación nacional de las decisiones sobre los tipos de interés, la emisión de billetes y monedas de euro y la gestión de las reservas en divisas.
Además, comparte las tareas de supervisión bancaria en Alemania con la institución de control de los mercados financieros, la BaFin.
Cambios
Para adaptarse a todos estos cambios, el Bundesbank reducirá el número de oficinas en Alemania de 127 a 47, y recortará la plantilla de los 10.970 empleados actuales a 9.000 trabajadores en 2012.
Sobre su futuro, la entidad asegura que mientras la Unión Europea sea una alianza de estados soberanos, "y esto debería permanecer así mucho tiempo", la existencia de los bancos centrales nacionales está justificada.