Economía

COMUNICADO: 7 de cada 10 líderes empresariales mundiales quieren reducir la deuda mediante recortes en el gasto público (1)

PIV412103, October 1, 2010 /PRNewswire/ --

-- Sólo el uno por ciento apoya la subida de impuestos: KPMG International Survey

Con el 72 por ciento de las empresas preocupadas por el nivel de deuda pública de su país y el 43 por ciento muy o extremadamente preocupadas, una nueva encuesta internacional de KPMG muestra que recortar el gasto público es el método más popular de gestionar la deuda pública.

Según la investigación publicada hoy de KPMG International titulada Paying the Bill, de los 538 líderes empresariales encuestados de todo el mundo, 7 de cada 10 dijeron que la deuda debería reducirse principalmente mediante recortes en el gasto público, elevándose al 77 por ciento entre los europeos. Recortar el gasto público fue la principal opción para América (69 por ciento) y el 54 por ciento para los encuestados del Pacífico asiático.

Al preguntar qué aspectos del sector público deberían recortarse, el pago al sector público es la opción más popular, elegida por el 53 por ciento globalmente, seguida por el gasto en defensa (47 por ciento) y los pagos de bienestar (34 por ciento). Sin embargo, es difícil trazar inferencias generales de esto, ya que gran parte de la necesidad percibida por un país de pagos de defensa y bienestar surge de las circunstancias locales e historia.

Los votos a favor y en contra del pago del sector público variaron ampliamente entre los países: Irlanda marcó un 100 por ciento a favor, pero sólo un 12 por ciento eligió esta opción en Francia.

"Las peticiones de recortes en el gasto público son un Nuevo fenómenos en tiempos de dificultad económica", afirmó Loughlin Hickey, responsable global de impuestos de KPMG International. "Sin embargo, este entusiasmo por los recortes en el gasto público presentan a los gobiernos un difícil problema político. Los recortes del gasto son siempre difíciles de implementar, especialmente en democracias y cuando los que tienen que afrontar el principal impacto son los propios empleados del gobierno".

El apoyo para la inversión pública en infraestructura fue bien recibido en la mayoría de los países: sólo el 24 por ciento eligió reducir estas inversiones como una opción para gestionar la deuda. Hubo mayorías en favor de mantener el gasto en infraestructura en todos los países, excepto Japón y Hong Kong, donde las visiones se dividieron para y frente a reducciones en el gasto, y en China, donde un destacado 61 por ciento quiso ver un recorte en la inversión en infraestructura.

"A menos que los gobiernos estén cómodos simplemente aceptando los actuales niveles de deuda y trabajando para cumplir los pagos por intereses -una opción que fue apoyada por el 16 por ciento de los encuestados-, no tendrán otra alternativa que subir los impuestos de una forma u otra", comentó Hickey.

Sin embargo, y no es una sorpresa, la opción menos popular fueron los impuestos. Sólo un uno por ciento globalmente eligió los impuestos como medio para que los gobiernos gestionen sus deudas. La encuesta muestra que un moderado número de encuestados respaldaría la subida fiscal si fuese sólo para el fin de pagar la deuda, y no de una subida general. Globalmente, el 19 por ciento respaldó esta idea, convirtiéndola en la tercera opción más popular tras recortar el gasto público y buscar otros medios que la subida fiscal.

Los países más propensos a las subidas fiscales fueron el Reino Unido (65 por ciento a favor), y Japón (60 por ciento a favor). Menos propensos, sin apoyar de ningún modo esta idea, fueron los Países Bajos. Italia, Polonia, Rusia y Eslovaquia.

"Los cambios en las tasas fiscales -nuevas, subidas, reducciones- son opciones utilizadas por los gobiernos para aliviar su deuda. De hecho, en la última década, KPMG ha documentado un lento paso de impuestos sobre las rentas corporativas hacia impuestos indirectos globalmente. Ese movimiento parece estar acelerándose durante este año", explicó Hickey. "A comienzos de agosto de 2010, apuntó planes por al menos 10 países para aumentar sus tasas de IVA o GST. Otros dos países, China y la India, planean introducir nuevos sistemas fiscales de consumo entre 2010 y 2013".

El informe también descubrió que el amplio consenso entre los encuestados es que los impuestos corporativos, los impuestos de consumo (GST/IVA) y las tasas fiscales de rentas personales en su país podría estar más o menos donde están ahora, o un poco más abajo.

Con la taxación corporativa, el 39 por ciento de los países del Pacífico asiático dijeron que debería estar entre el 20 y el 30 por ciento, mientras que el 38 por ciento optó por 10-20 por ciento. La tasa preferida media fue del 22 por ciento, solo un poco más abajo que la actual media entre los países del Pacífico asiático que, en el momento del estudio, estaba en el 27,5 por ciento(1).

En Europa, hubo un rango igualmente amplio de visiones: el 76 por ciento de los encuestados eligieron algo entre el 10 y el 30 por ciento. La media elegida fue del 24 por ciento, una fracción superior que la tasa fiscal corporativa media actual de la UE del 23,2 por ciento.

Las visiones en América fueron más centradas: el 36 por ciento optó por 20-30 por ciento y una media del 24 por ciento. Esto se compara con la actual tasa media para América del 27 por ciento.

Sobre las tasas de consumo, una mayoría de europeos (55 por ciento) optó por una tasa del 15-20 por ciento con una media del 17 por ciento. En los países del Pacífico asiático, el mayor grupo (48 por ciento) eligió entre el 5 y el 10 por ciento con una media del 9 por ciento, y América se dividió entre el 5-10 por ciento, y el 15-20 por ciento, con una media del 12 por ciento.

Las tasas elegidas para unos impuestos personales de tasa más alta contaron una historia algo diferente. Los europeos estuvieron encantados con tasas de más del 40 por ciento, mientras América eligió un amplio rango de opciones entre el 10-40 por ciento. En los países del Pacífico asiático estuvieron claramente a favor de unos impuestos personales más bajos, con el mayor grupo (34 por ciento) eligiendo un máximo del 10-20 por ciento.

"La evidencia sugiere que el contrato básico entre el gobierno y la empresa es el mismo en diferentes partes del mundo, en niveles de servicio ofrecidos para un aceptable nivel de pago", indicó Hickey. "Las diferencias surgen cuando consideramos lo que las diferentes culturas creen apropiado que hagan los gobiernos, y cómo debería financiarse esta actividad".

Metodología

La práctica fiscal internacional de KPMG encargó un proyecto de investigación que cubre 538 responsables de la toma de decisiones corporativas de 26 países.

Los investigadores independientes realizaron entrevistas telefónicas en abril y mayo de 2010. Encuestaron a consejeros delegados y altos representantes de compañías en un amplio rango de sectores de la industria, con ingresos anuales desde menos de mil millones a más de cinco mil millones de dólares estadounidenses. Los países representados fueron:

[TAB]

Argentina Alemania Rusia

Australia Hong Kong Singapur

Bélgica Hungría Eslovaquia

Brasil India España

Canadá Irlanda Suiza

Chile Italia Reino Unido

China Japón EE. UU.

República México

Checa Países Bajos

Francia Polonia

[FTAB]

Una copia de Paying the Bill está disponible en:

http://www.kpmg.com/Global/en/IssuesAndInsights/ArticlesPublications/Pages/paying-the-bill.aspx

(CONTINUA)

WhatsAppFacebookFacebookTwitterTwitterLinkedinLinkedinBeloudBeloudBluesky