
Barcelona, 30 sep (EFE).- Los principales sindicatos catalanes han emplazado hoy al Gobierno a echar marcha atrás a la reforma laboral tras el rechazo que se visualizó ayer en la calle y que creen no admite otra salida, mientras que la titular de Trabajo, Mar Serna, ha pedido restablecer los puentes de diálogo.
Un día después de la primera huelga general a la que se ha enfrentado el ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero, CCOO y UGT en Cataluña han querido dejar claro que consideran un éxito el paro de ayer y que el Gobierno no puede más que poner manos a la obra para rectificar su política laboral.
La portavoz de CCOO, Dolors Llobet, ha asegurado, en declaraciones a Efe, que el proyecto de ley de presupuestos del Estado para 2011 sería un "buen espacio" para introducir cambios a la reforma laboral.
"El secretario general de CCOO, Ignacio Fernández Toxo, ya ha dicho que una ley se cambia con otra ley. Y la ley de cajas ya ha sido un buen ejemplo de eso. Así que los presupuestos de 2011 también podrían ser utilizados para introducir cambios en la reforma laboral", ha apuntado.
En todo caso, desde CCOO de Cataluña se pide al Gobierno que no se limite a hablar de la necesidad de consenso sino a dar pasos "reales" en esa dirección, tomando medidas como sería, por ejemplo, renunciar a la ampliación de la edad de jubilación hasta los 67 años.
Por su parte, UGT de Cataluña ha insistido también en que cualquier movimiento desde el Gobierno debe tener en cuenta, primero, que "la huelga ha existido" y el sindicalismo tiene aún un peso importante en España, "pese a las campañas de desprestigio".
A juicio del portavoz de UGT de Cataluña, Miquel Angel Escobar, el ejecutivo central tiene que decidir "si continua al dictado de los mercados financieros o capta el mensaje de los trabajadores".
"La foto está clara. La sociedad española ha dicho claramente que la reforma laboral no es el camino y que, si se tiene que abrir un proceso de diálogo, éste debe incluir la restitución de los derechos perdidos", ha dicho, en alusión al contenido de la reforma laboral.
En esta línea, ha abogado por dar marcha atrás a la reforma laboral aprobando una ley que la modifique y no cree posible que sindicatos y Gobierno puedan sentarse a hablar de otros temas como la reforma del sistema de pensiones sin que antes se haya rectificado en ese ámbito.
Desde el gobierno catalán, la responsable de Trabajo, Mar Serna, ha apelado hoy a "restablecer los puentes" entre las organizaciones sindicales y el Gobierno tras la huelga general de ayer y ha pedido "seriedad y rigurosidad" para poder avanzar en el diálogo y crear ocupación en España.
En declaraciones a RAC1 recogidas por Efe, Serna ha subrayado que "ahora es el momento más importante" porque "el país necesita confianza" para "generar actividad económica y ocupación".
"Pedimos rigurosidad y seriedad a todo el mundo para que se sienten a la mesa a resolver los problemas del país. Seguramente nadie se saldrá con la suya, pero es la manera de avanzar: negociando y hablando", ha señalado la consellera.
Por su parte, el portavoz adjunto de CiU en el Congreso Josep Sánchez Llibre ha propuesto hoy una nueva ley de huelga, que pare los pies a aquellos piquetes "violentos" que impiden trabajar a los empleados que lo desean.
"No podemos estar en pleno siglo XXI con una ley de huelga que es preconstitucional", ha afirmado Sánchez Llibre en declaraciones a RNE recogidas por Efe.
ERC ha lamentado que violentos incidentes que se produjeron ayer en el centro de Barcelona se puedan utilizar para "enmascarar" y "sepultar" el "éxito" de la huelga general en Cataluña.
El portavoz de ICV en el Congreso, Joan Herrera, ha destacado en el Congreso el "éxito" de la huelga general de ayer y ha pedido al Gobierno que rectifique sus políticas y al Parlamento que "recupere la sintonía" con la sociedad y no legisle en contra de su voluntad.
Herrera cree que ayer la ciudadanía "tiró de las orejas a un Zapatero que hace demasiado tiempo que no escucha", un "toque de atención muy contundente" que el Gobierno no puede dejar de atender.