Barcelona, 29 sep (EFE).- Poco antes de las nueve de la mañana el aspecto del andén de Cercanías de la plaza Cataluña de Barcelona era desangelado y con muy poca gente esperando los trenes, igual que en las líneas 1 y 3 del Metro.
De hecho, la plaza Cataluña, uno de los centros neurálgicos y de conexión de transporte, ya que confluyen Metro, Cercanías y Ferrocarriles de la Generalitat, se encontraba muy vacía a media hora de finalizar los servicios mínimos.
Los trenes de Cercanías llegaban a la estación con muy pocas personas y en los andenes del Metro, a pesar de que el tiempo de espera era de 10 minutos, en vez de estar abarrotados, como era de prever, parecían más bien los de un día cualquiera a las 11:00 de la mañana.
Maria José, dependienta del kiosko Relay de Plaza Cataluña, ha explicado que "la estación ha estado vacía, parece un domingo por la mañana y cuando cierren los servicios mínimos no sé qué haré. Yo creo que hoy mucha gente se ha quedado en casa".
Maria José vive en Terrassa y ha venido hasta Plaza Catalunya con Renfe Cercanías, "en un tren abarrotado, que eso sí salió puntualmente a las 6:30 horas de la mañana. Los servicios mínimos se están cumpliendo".
En el andén de la L-3 del Metro, Carmen ha constatado asimismo que "hoy hay mucha menos gente de la habitual a estas horas".
En otro andén de la L-1 del Metro apenas hay 80 personas esperando el convoy hacia Fondo, con lo que da la sensación de estar medio vacío, nada parecido a las aglomeraciones que en principio podían esperarse dada la baja frecuencia de los servicios mínimos que se pactaron con la Generalitat.
Marta perdió el tren de Cercanías hacia Vilafranca, y lleva casi media hora esperando en Plaza Cataluña, pero reconoce que hay "poquísima gente" y que había esperando grandes aglomeraciones por la huelga.
Los servicios mínimos han funcionado con normalidad en el transporte público y está previsto que sigan igual esta tarde, de 17:00 a 20:00 horas.
