Caixa Manresa tuvo que rascarse el bolsillo con fuerza durante el primer semestre. La entidad, que está en pleno proceso de integración con Caixa Catalunya y Tarragona, destinó durante ese periodo cerca de 2,486 millones de euros a indemnizar al personal clave de la alta dirección.
Según consta en la comunicación remitida por la entidad a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), la alta dirección recibió casi la mitad de lo que la entidad ganó durante el primer semestre del año, 5,7 millones (el 37 por ciento menos).
Estos mismos directivos también vieron como las obligaciones contraídas en materia de pensiones o de pago de primas de seguros de vida se disparaban un 445 por ciento.
Si bien es cierto que las cantidades tan sólo pasaron de los 20.000 euros que el personal clave de la alta dirección se embolsó en el primer semestre de 2009 a los 120.000 euros en igual semestre de este mismo ejercicio.
El incremento de los sueldos y otras remuneraciones análogas fue, sin embargo, más comedido al situarse al cierre del primer semestre en el 20 por ciento. El personal clave de la alta dirección pasó de cobrar 749.000 euros entre enero y junio de 2009 a 899.000 euros en igual periodo de este año.
Hay que recordar que, tras la fusión con Tarragona y Catalunya, tanto el presidente, Manel Rosell, como el director general, Feliú Formosa, salieron de la entidad. Aunque la información a la CNMV no se recoge que las indemnizaciones sean por este concepto ni desde la entidad pudieron aclarar los términos de esos pagos.
Las reiteradas reuniones que mantuvieron los miembros del consejo de administración dispararon el 40 por ciento los pagos por el concepto de dietas por asistencias y otras remuneraciones análogas.
Según los datos remitidos por la propia entidad, los miembros del consejo de administración de Caixa Manresa pasaron de ingresar 77.000 euros en el primer semestre de 2009 a 108.000 euros en igual tramo del año de este ejercicio.
Sin embargo, llama a la atención que los miembros de la Comisión de Control de la entidad fueron los únicos que no disfrutaron de ese incremento de los emolumentos. Frente a los 11.000 euros que percibieron en el primer semestre de 2009 en igual periodo de 2010, esa cifra se había reducido hasta los 10.000 euros, lo que porcentualmente se traduce en un 9 por ciento menos.
Caixa Manresa, junto con Caixa Tarragona, ya está bajo el paraguas de Caixa Catalunya. Desde 1 de julio, las tres cajas mantienen integrada su operativa y funcionan como una sola al haber sellado su unión a través de una fusión tradicional que ha llevado a las tres cajas catalana a fuertes gastos.
Una integración cara
Esta misma semana, elEconomista informaba de que las dietas del consejo de Caixa Tarragona se habían disparado hasta un 50 por ciento durante el primer semestre, como consecuencia de las reiteradas reuniones que mantuvieron sus miembros con el objeto de cerrar la integración con las otras dos entidades catalanas. La alta dirección de esa caja se subió el 31,8 por ciento su retribución durante ese perido pese a ver cómo se recortaba el beneficio un 44,3 por ciento.
Caixa Catalunya, por su parte, cerró 2009 con un aumento de los sueldos del 6,9 por ciento hasta los 4,07 millones pese al recorte de los beneficios del 59,1 por ciento. Sólo en pensiones, los jefes de Caixa Catalunya se llevaron 2,38 millones, el 35 por ciento más.
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