Las arcas de la Generalitat se beneficiaron directamente de las comisiones que Felix Millet, a través de la Fundación Palau de la Música, obtuvo de Ferrovial a cambio de interceder en la concesión de contratos públicos de 2000 y 2001.
Ferrovial emitió ayer un comunicado en el que dice que es "completamente ajena, y por tanto desconoce el destino que la Fundación del Palau de la Música y el Orfeó Catalán han podido dar a las aportaciones realizadas en concepto de patrocinio. Todas las actividades patrocinadas por Ferrovial corresponden a actuaciones efectivamente realizadas por el Palau de la Música".
La compañía argumenta que "las licitaciones mencionadas en el informe de la Agencia Tributaria se desarrollaron conforme a rigurosos procedimientos administrativos y cumplieron los principios y requerimientos legales: los pliegos establecieron criterios objetivos de valoración con suficiente precisión y la adjudicación se hizo a la oferta más ventajosa para los intereses públicos".
En uno de los documentos que contiene el informe de la Agencia Tributaria sobre el desfalco del Palau se reconoce un mecanismo de actuación por el que Ferrovial debía abonar cantidades a la Generalitat, entonces presidida por Jordi Pujol y con Artur Mas de consejero de Economía, a través de esta Fundación.
Este texto, con fecha de marzo de 2000, reconoce un pago de 100 millones de pesetas de Ferrovial, equivalentes al 4 por ciento de 2.500 millones de pesetas de obras. Asimismo, se señala que la Generalitat tenía pendientes de adjudicar otros 2.250 millones. De esta cifra, la Fundación debía dar un 2,5 por ciento a la Generalitat, unos 56 millones de pesetas.
Sorpresa de los peritos
El informe de los péritos muestra su sorpresa ante esta aportación al Gobierno catalán. "Sorprende que la Fundación tenga que realizar una donación a una Administración pública, como es la Generalitat, cuando normalmente la donación sigue el circuito inverso, es decir son las instituciones del Palau de la Música las que reciben donaciones de las diferentes administraciones públicas". Además, indica que "resulta ciertamente extraño que Ferrovial satisfaga una cantidad de dinero - en este caso del 4 por ciento- vinculado a la concesión de obras públicas".
En otra parte del informe sobre el Palau, la Agencia Tributaria establece una relación de fechas referentes a la adjudicación de obra pública, el importe de la mismas y la aplicación sobre ese importe del 2,5 por ciento.
A la suma de las comisiones se le restaba una partida, que aparece en la documentación como "Liquidación Generalitat". De un cobro de 50 millones debía aportarse a la Generalitat 42 millones.
Esta cifra parece haber sido cobrada presuntamente de Ferrovial en diciembre del año 2000 y la diferencia se llama "sobrante para la Fundación". Ferrovial también acordó en 2001 una aportación al Palau de 85 millones de pesetas.
De esta cifra, 10 millones corresponden a la aportación que como miembro de honor hizo la constructora a la Fundación y el resto es "por obra", es decir, como contraprestación por la adjudicación de obras y no tanto como patrocinio.
Además, del pago a la Generalitat, parte de las comisiones recibidas por Millet beneficiaron a hombres de Convergencia Democrática de Cataluña, como Carles Torrent (ya fallecido), administrador de la Fundación Ramon Trias Fargas y también de las finanzas de Convergencia. Asímismo, aparece mencionado pagos a "Daniel", que podría ser Daniel Osacar, al que sus- tituyó. El informe también destaca un anónimo enviado a los Mossos de Esquadra.
En él se alerta de una presunta "comisión" de 600 millones de pesetas de las obras del Petit Palau de la Música a la Fundación Faes, que no ha podido de- mostrarse.
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La Agencia Tributaria denuncia los pagos a Millet
