
Las entidades europeas depositaron la semana pasada 237.147 millones de euros en la 'ventanilla' del Banco Central Europeo, la cantidad más alta desde julio. Además, la institución monetaria ya ha gastado más de la mitad de los 60.000 millones de euros destinados a la adquisición de cédulas hipotecarias.
Entre bancos anda el juego... aunque éste cada vez resulta menos 'divertido'. El funcionamiento es el siguiente. El Banco Central Europeo (BCE), ejerciendo su función de prestamista de último recurso en tiempos convulsos, ha reforzado durante la crisis las operaciones mediante las que suministra liquidez a las entidades privadas para evitar que se queden sin 'gasolina'. Para dar aún más facilidades, desde octubre de 2008 les proporciona tanto dinero como le piden y al mismo interés al que se encuentra el precio oficial del dinero. En la actualidad, y desde mayo de 2009, el 1%.
La mitad de la munición, gastada
Hasta ahí, perfecto. Todo sea porque los bancos tengan dinero para atender sus necesidades de liquidez y evitar males mayores. Lo 'curioso' viene luego. ¿Qué hacen los bancos con el dinero que reciben? Pues un mal negocio. ¿Por qué? Porque lo reinyectan en las cuentas del BCE. Lo aparcan en la facilidad de depósito. ¿Y cuánto les da por ello? La apreciable cantidad del... ¡0,25%! ¡Un negocio redondo para el BCE, que presta al 1% y remunera al 0,25%!
La última muestra de esta paradójica realidad de dinero infructuoso se apreció durante la semana pasada. Según el balance semanal presentado hoy por el BCE, los bancos depositaron en su 'ventanilla' 232.147 millones de euros, 5.000 millones más que en la semana anterior y la cifra más alta desde comienzos de julio de 2009.
Al mismo tiempo, la actualidad del BCE pasa por su programa de compras de cédulas hipotecarias, en vigor desde el pasado 6 de julio. Tras la última oleada de adquisiciones, la institución monetaria ha empleado ya más del 50% de la cantidad destinada a este programa, que asciende a 60.000 millones de euros. Según los últimos datos, ha comprado títulos por valor de 30.551 millones, y tiene de plazo hasta finales de junio para 'disparar' la cantidad restante.