
El presidente estadounidense, Barack Obama, dijo este martes que dedicaría parte de los fondos del plan de rescate del sistema financiero para estimular el empleo y reducir el enorme déficit presupuestario, que prometió reducir a la mitad para cuando termine su período de gobierno, en 2013.
Obama, reveló un nuevo paquete de medidas que incluye además recortes de impuestos a las pequeñas empresas, obras de infraestructura e inversiones para el ahorro de energía.
En un importante discurso en Washington, Obama prometió aliviar el coste humano de una tasa de desempleo al 10%, impulsando la capacidad de las pequeñas empresas para retener una mayor parte de sus beneficios y contratar más trabajadores.
Más trabajo y beneficios para la economía
Obama advirtió sin embargo que la creación de puestos de trabajo no se realizará a expensas de la responsabilidad fiscal, dado el déficit presupuestario proyectado, superior a 1 billón (millón de millones) de dólares, que afecta a la economía estadounidense.
El presidente prometió concentrarse en "aquellas áreas que generen el mayor número de puestos de trabajo y al mismo tiempo los mayores beneficios para nuestra economía".