ALMERIA, 8 (EUROPA PRESS)
Miles de agricultores del sector hortofrutícola, 15.000 según los convocantes y 2.000 según fuentes policiales, se manifestaron hoy en Almería contra la negociación del Acuerdo de Asociación UE-Marruecos.
Durante la manifestación, que transcurrió con normalidad por las calles de la capital almeriense, Asaja, COAG, UPA, junto con la Federación Andaluza de Empresas Cooperativas Agrarias (Faeca), la Asociación de Empresas Cosecheras-Exportadoras de productos Hortofrutícolas de Almería (Coexphal) y la Asociación de Empresas Comercializadoras y Alhóndigas (Ecohal) mostraron su "rechazo a la falta de apoyo" por parte del Ministerio en cuanto a la defensa de los intereses de los agricultores españoles.
El secretario general de COAG, Miguel López, defendió durante su intervención en la protesta que en Europa "debe imperar el concepto de soberanía alimentaria", ya que, según vaticinó, "probablemente suframos una crisis alimentaria y desabastecimiento", por lo que solicitó el amparo de las administraciones públicas al campo español.
"Estamos hartos y cansados de que se defiendan exclusivamente a las grandes corporaciones que representan la distribución y a las grandes multinacionales, somos familias que nos dedicamos a trabajar y no a especular, y por tanto, creemos que hay que introducir mecanismos de regulación", indicó el secretario general de COAG.
Por su parte, el secretario de UPA, Agustino Rodríguez, señaló a la consejera de Agricultura de la Junta de Andalucía, Clara Aguilera, como una de las voces que "tiene que evitar las políticas abusivas, las importaciones ilegales y la ampliación de acuerdos en partidas compartidas con países terceros". De esta forma, recordó que la agricultura es un "sector fundamental" en la economía española que se está "arruinando" debido a las relaciones actuales con terceros países.
Mientras, el secretario provincial de Asaja en Almería, Francisco Vargas, advirtió que los agricultores no están "en desacuerdo con el desarrollo social de ningún país pero sí con los grandes poderes económicos", ya que, según aseveró, "las grandes cadenas de distribución van a comprar a terceros países donde esclavizan a la mano de obra y donde el producto está a unos precios irrisorios para luego venderlos a precio de oro en los mercados europeos".
Unidos tras una misma pancarta con el lema 'No más concesiones a terceros países: las frutas y hortalizas no son moneda de cambio', agricultores, exportadores, cosechadores y empresarios del sector y su industria auxiliar manifestaron el deseo de un cambio en la política del Ministerio y del posicionamiento que mantiene en Bruselas cuando se trata de negociar con los productos agroalimentarios, de forma que anunciaron nuevas movilizaciones "si no se les tiene en cuenta".
