El presidente del Banco Central Europeo (BCE), Jean-Claude Trichet, ha reiterado que la crisis económica todavía no ha terminado, como ya manifestó en la reunión del G20. Por eso, considera que por ahora es necesario mantener medidas "audaces" para combatirla y que la vuelta a la normalidad debe ser "creíble".
"Todavía no es el momento de decir que la crisis ha terminado", señaló Trichet en declaraciones a la prensa tras reunirse con el presidente de la Eurocámara, Jerzy Burzek.
El presidente del BCE manifestó además que "es muy importante ser convincente en el camino hacia una posición normal y sostenible por lo que se refiere a la política monetaria, fiscal y al apoyo al sector financiero".
"Ambas cosas son necesarias, ser audaces y proporcionales ahora ante los [planes] que tenemos y, al mismo tiempo, ser creíbles en la vuelta a la normalidad", concluyó Trichet.
Recuperación más rápida de lo previsto
En el seno del Banco Central Europeo, la cautela es generalizada, aunque con matices. Hoy, el gobernador del Banco de Francia y miembro del Consejo de Gobierno de la insititución financiera europea, Christian Noyer, ha afirmado que la economía mundial está mejorado a un ritmo "más rápido" de lo previsto, lo que le hace creer en "el final de la recesión".
En declaraciones a la radio francesa Europe1, Noyer reconoció ser "fundamentalmente optimista" tras observar como los signos de recuperación económica se han "multiplicado" desde mayo.
Sin embargo, el banquero galo advirtió de que hay que mantener la prudencia y, en línea con el discurso de Trichet, abogó por que los gobiernos y bancos centrales mantengan por el momento sus medidas extraordinarias y vigilen de forma especial el incremento del paro.
Además, indicó que es importante que las divisas permanezcan estables para permitir que prosiga la recuperación. "Tendremos que estar muy atentos a eso", expresó.
Trichet: No es momento de retirar los estímulos
