LONDRES, July 31 /PRNewswire/ --
Ha pasado un año desde que la diseñadora de moda Joanne Scott se sometiera a un tratamiento de cáncer que ha cambiado su vida - y que ha servido para hacer historia.
Scott, de 54 años, fue la primera mujer del mundo en recibir una inyección de células de eliminación natural activada por tumores (TaNK) como tratamiento de la leucemia.
Sus médicos del Royal Free Hospital de Londres la recomendaron una terapia experimental tras dos años de tratamientos tradicionales, incluyendo quimioterapia y transplante de médula espinal, que no sirvieron para que consiguiera la remisión. Scott no confiaba en que este tratamiento funcionase. "Pensé que volvería a ponerme enferma", afirmó, "lo mismo que en las otras ocasiones".
Pero el nuevo tratamiento ha conseguido el éxito allí donde los otros no lo han logrado, mostrándose como una esperanza entre los oncólogos en relación a las células TaNK que pueden ser clave dentro de un nuevo tipo de terapia avanzada contra el cáncer.
Los médicos del Royal Free inyectaron a Scott las células de eliminación natural (NK) tomadas de su hija, Tara, que en ese momento tenía 21 años. Al día siguiente, Scott dejó el hospital para marcharse a su casa.
"Inmediatamente me sentí bien. Podía salir a cenar y ese tipo de cosas", comentó Scott. "Fue excepcional, después de todos esos otros tratamientos a los que me habían sometido, que fueron totalmente agotadores".
La idea de este nuevo tratamiento es la siguiente: las células NK, que son parte del sistema inmunológico del cuerpo, se activan y luchan contra cualquier tipo de células de leucemia que sobreviven a la quimioterapia en caso de activarse para luchar contra el cáncer. A pesar de ello, en pacientes con cáncer, las células NK no se activan, por lo que no atacan a las células con cáncer.
Los médicos de Scott activaron las células que cogieron de su hija dentro de las células TaNK, que pueden eliminar incluso los tumores resistentes NK. A la semana de su inyección, las células TaNK han sobrevivido y se han multiplicado. Al mes, un estudio de la médula espinal - el sitio afectado por el tipo de leucemia que padece - confirma que las células TaNK están atacando el cáncer.
Scott tuvo que volver al hospital durante 5 semanas porque sus neutrófilos, un tipo de célula blanca de la sangre, se encontraban peligrosamente bajos - ella cree que como consecuencia de todos los años de sometimiento a la quimioterapia. Desde su descarga, visita a los médicos de forma regular para someterse análisis de sangre y transfusiones de plaquetas de forma ocasional, pero aparte de eso, su vida ha vuelto a la normalidad.
"Trabajo como profesional autónomo. Si me noto cansada, puedo irme a casa - descansar en una cama, o puedo levantarme a media mañana e irme a trabajar, pero no lo he hecho. He estado trabajando cinco días a la semana de 9 a 5. Me siento bien", dijo Scott.
Su buena salud y buen estado de ánimo han supuesto un cambio considerable en lo que respecta a cómo se sintió cuando se le diagnosticó leucemia mieloide aguda (AML) hace cuatro años. La AML es un cáncer de la línea mieloide de las células de la sangre, además de la leucemia aguda más habitual entre los adultos.
"Me sorprendió cuando me diagnosticaron leucemia", afirmó Scott. "Siempre he comido sano y he hecho ejercicio, todo ese tipo de cosas, y pensé que me encontraba sana".
En pacientes con AML, una cifra anormal de células blancas en la sangre se acumula en la médula espinal e impiden la producción de las células normales de la sangre. Los tratamientos normales incluyen la quimioterapia, la terapia de radiación y los trasplantes de la médula ósea.
Scott se sometió a entre tres y cuatro sesiones de quimioterapia - no puede recordar la cifra exacta y no quiere recordar demasiado esta dolorosa parte de su pasado - pero el cáncer volvió.
Sus médicos trataron la recurrencia con trasplantes autólogos de medula ósea, pero la segunda vez que Scott se sometió al tratamiento tampoco resultó satisfactoria.
"Estaba muy molesta, de verdad", indicó en torno a su segunda recaída. "No quiero volver a pensar en cómo me sentía. No quiero volverme a sentir así".
Después de que fallara su transplante, Scott perdió las esperanzas de poder sobrevivir a la AML. Comenzó a prepararse para la muerte. "Cuando tienes unos 50 años al menos puedes pensar 'Al menos he vivido media vida'", comentó. "Al menos he vivido hasta cumplir 52 años".
Esta sensación de resignación se desvaneció después de someterse a una terapia con células TaNK, según indicó Scott. El tratamiento ha renovado sus esperanzas para el futuro. "Ahora pienso '¿Qué pasará si llego hasta los 70 u 80 años?'". Y afirmó: "Quiero seguir teniendo salud para vivir y convertirme en una anciana".
Los investigadores del Royal Free, liderados por el investigador principal, el doctor Panos Kottaridis, están reclutando pacientes en la actualidad para el ensayo clínico con terapia de células TaNK, que cuenta con licencia de Coronado BioSciences, una compañía biofarmacéutica con sede en EE.UU. Tres pacientes reclutados hasta la fecha, incluyendo a Scott, no consiguieron el éxito en sus terapias anteriores antes de su ingreso en el ensayo.
"Los resultados hasta la fecha son muy esperanzadores, ya que hay tres pacientes con enfermedad recurrente que disfrutan de la remisión a largo plazo", comentó el doctor Kottaridis. "A pesar de ello, este ensayo en Fase I se ha diseñado a fin de evaluar la toxicidad como principal objetivo, siendo la eficacia el objetivo secundario. Es muy importante para nosotros conseguir el reclutamiento de más pacientes y finalizar la fase actual antes de pasar a realizar un ensayo internacional multicentro en el que se demuestren los resultados clínicos favorables".
Los lectores que quieran saber más sobre el ensayo y los pacientes interesados en el reclutamiento deberán visitar la base de datos del ensayo Cancer Research UK desde la página web http://www.cancerhelp.org.uk/trials/trials/trial.asp?=&trialno=15617, contactar con el doctor Kottaridis por e-mail (panagiotis.kottaridis@royalfree.nhs.uk) o consultar con su médico.
Robert Flamm para Coronado BioSciences, +1-212-845-4226, robert.flamm@russopartnersllc.com