Madrid, 23 jul (EFE).- CCOO y UGT instan a la CEOE a que explique y concrete su voluntad de acuerdo tras una "trayectoria errática y contradictoria" en su conducta y en la presentación de sus demandas y reflexiones.
Así lo indican los dos sindicatos en una declaración conjunta hecha pública hoy por sus direcciones confederales, en la que analizan el momento por el que atraviesa el diálogo social tras varios meses de contactos y negociaciones.
En la declaración, los sindicatos subrayan que "la necesidad perentoria" de las medidas urgentes que afectan a los trabajadores y empresas, ante la crisis, requiere que la negociación del diálogo social "concluya este mismo mes".
CCOO y UGT reiteran que el diálogo social debe centrarse principalmente, dada la actual coyuntura económica, en la situación de las personas que han perdido su empleo o que no pueden acceder a él.
Además, insisten en que otro de los objetivos debe ser la reactivación de la economía con medidas orientadas a la creación de empleo y a un cambio del patrón de crecimiento.
Tras varios meses de negociaciones, los sindicatos consideran que las organizaciones empresariales "no han sabido o querido" precisar "el perímetro" de un posible acuerdo tripartito.
Así, añaden que han "irrumpido unas veces con un ambicioso programa reivindicativo, que incluía capítulos sensibles de reforma laboral y modalidades contractuales abiertamente hostiles con el derecho laboral", y otras, cuestionando la estructura de la negociación y el contenido de la declaración de julio del pasado año donde se fijó el diagnóstico y los objetivos del diálogo social.
En la declaración conjunta, CCOO y UGT reiteran su "decidida apuesta" por el diálogo social como mejor instrumento para canalizar las iniciativas sociales y económicas que necesita el país.
Añaden que las negociaciones entre Gobierno, patronal y sindicatos "deben acotar definitivamente" el ámbito del diálogo social y centrarse en el impulso de la recuperación de la actividad económica y el empleo, mejorar la protección social y avanzar hacia un nuevo modelo productivo.
Cualquier demanda que devalúe estos objetivos, precisan, "sólo puede contribuir a incentivar la diferencia y el conflicto" y a alejar las posibilidades de un acuerdo, una situación que, concluyen, "no entendería la inmensa mayoría de la sociedad española".