SANTANDER, 16 (EUROPA PRESS)
El vicepresidente del Santander Matías Rodríguez Inciarte estimó hoy que el Fondo de Reestructuración y Ordenación Bancaria (FROB) que ultima el Gobierno "va en la buena dirección", aunque matizó que su efectividad dependerá de la aplicación práctica.
"Los principios sobre los que se asienta son correctos, no tienen porque afectar a la competencia", dijo Inciarte en un curso de la Universidad Internacional Menéndez-Pelayo (UIMP) en Santander sobre la crisis y el sector financiero, al ser preguntado por el plan de rescate financiero que detalló ayer la vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Economía y Hacienda, Elena Salgado. "Me ha sonado muy bien", sostuvo.
Sin embargo, Inciarte incidió en la necesidad de que las medidas de rescate sigan una serie de principios, como limitarse a entidades viables, que los bancos sanos no se vean obligados a recibir capital público y que las aportaciones de capital público no rompan los niveles de competencia.
Las recapitalizaciones, subrayó, deben basarse en precios de mercado y no a precios homogéneos para entidades con diferentes niveles de solvencia, y deben implicar soluciones de salida del capital público, porque la intervención del Estado "debe ser pasajera y devolver a las entidades al sector privado lo antes posible", valoró.
Asimismo, Inciarte sostuvo que no se debe eliminar el riesgo moral de las entidades que incurrieron en prácticas demasiado arriesgadas, por lo que "toda ayuda pública debe estar vinculada a reestructuraciones".
A su parecer, no ha habido suficiente coordinación en las medidas de rescate aplicadas a escala mundial en los sistemas financieros, lo que puede llevar a cabo una ruptura de los terrenos de competencia con el riesgo de generar nacionalismo bancario, un proteccionismo encubierto.