MADRID, 10 (EUROPA PRESS)
El Grupo Parlamentario Socialista presentó hoy sus enmiendas parciales a la Ley de Cajas de la Comunidad de Madrid en las que abogan por que el presidente de Caja Madrid necesite un voto favorable de al menos dos tercios de los miembros del Consejo para ser presidente ejecutivo, como ocurría con anterioridad.
Según explica el texto de enmiendas de los socialistas madrileños a la Ley de Cajas presentada por el Ejecutivo de Esperanza Aguirre, con esta enmienda se apuesta por "facilitar el consenso" en la entidad financiera, y se opone al hecho de que por el hecho de acceder a la Presidencia ya se ostente el poder ejecutivo en la entidad de manera que impere en consenso.
Los socialistas apuestan por que la elección de las entidades representativas en la Caja y el número de consejeros generales que corresponden a cada una requiera el apoyo de al menos de dos tercios del conjunto de los diputados de la Asamblea de Madrid por mayoría cualificada. Con esta medida los socialistas quieren eliminar la "arbitrariedad" que, a su juicio, conlleva que el consejero de Economía y Hacienda de la Comunidad de Madrid se reserve la elección del 51 por ciento de las entidades representativas de la caja.
Desde el PSOE proponen modificar los consejeros generales correspondientes a las entidades representativas de la caja, de manera que se igualen los correspondientes a los sindicatos con la suma de los que provienen de la Cámara de Comercio y de la CEIM. De esta manera, un 26 por ciento correspondería a las organizaciones sindicales, un 13 por ciento a las organizaciones empresariales, y un 13 por ciento a la Cámara de Comercio de Madrid.
Asimismo, apuestan por la modificación de la representación de los consejeros de las universidades (16 por ciento) de manera que "el número de consejeros generales asignados a cada universidad será directamente proporcional al número de alumnos matriculados en cada una de ellas".
Con esta medida se pretende "mantener la paridad entre las organizaciones sindicales y empresariales, incluyendo éstas a la Cámara de Comercio de Madrid". Además, quieren "incrementar la representación de las universidades" con un criterio de ponderación en función de los alumnos matriculados en cada una de ellas.
Los socialistas vuelven a las dos circunscripciones vigentes en la ley anterior a la hoya de la elección de los consejeros generales del sector de impositores. La primera, al igual que ocurría antes, corresponderá a la Comunidad de Madrid y la segunda, al resto de comunidades o ciudades autónomas donde las cajas de ahorro tengan oficina abierta.
Asimismo, quieren homogeneizar el método de elección de vocales en el Consejo de Administración para cada uno de los sectores. Así, proponen que los vocales de cada sector en el Consejo de Administración los designe la Asamblea, como cuerpo electoral único, a propuesta de, al menos, un 10 por ciento de los consejeros generales del sector y subsidiariamente por el Consejo de Administración. Además, dice que si hubiera pluralidad de propuestas "éstas deberán contener el orden de preferencias de los candidatos".
La segunda propone que los puestos en el Consejo que correspondan a cada sector se atribuirán en proporción de los votos obtenidos en la Asamblea General por cada candidatura, resultando elegidos los que ocupen lugares preferentes en las mismas. Cada candidatura deberá contener un número de suplentes igual al de los titulares, con indicación de la correspondencia de cada uno de ellos, añade el escrito.
