MADRID, 24 (EUROPA PRESS)
El pequeño y mediano comercio español cerró el primer trimestre del año con una caída media de la facturación del 20% respecto al mismo periodo del año anterior, debido a que marzo fue "el peor mes de toda la crisis", según dijo a Europa Press el secretario general de la Confederación Española de Comercio (CEC), Miguel Angel Fraile.
La reducción de las ventas alcanza el 70% en subsectores como el equipamiento del hogar y el mobiliario; hasta un 40% en el Comercio (ICOMERC.MC)de productos relacionados con la automoción; un 30% en electrodomésticos, y un 25% en moda y calzado, mientras que es menos acusada en ocio (entre un 15% y un 20% menos) y en alimentación (entre un 2% y un 5% menos).
Fraile, que consideró que el sector ha "tocado fondo", confió en que a partir de ahora "poco a poco" se irá reactivando el consumo, de manera que estima que habrá una "recuperación suave" esta temporada de primavera-verano para poder "superar este año", en tanto que espera que el comportamiento de la demanda cambie en 2010.
"A peor no vamos a ir; menos consumo no puede haber", afirmó el secretario general de la CEC, quien explicó que los resultados de marzo fueron peores porque aún había rebajas en algunos establecimientos y por el efecto calendario, al caer este año la celebración de la Semana Santa en abril.
El desplome de las ventas conlleva el cierre de establecimientos y la pérdida de empleos, si bien Fraile subrayó que el pequeño comercio "tiene más capacidad de aguante y es el que menos empleo pierde".
En cualquier caso, insistió en que el sector está comenzando a apreciar este mes "ligeros síntomas de recuperación", gracias, entre otros motivos, a la reducción de precios que están ofreciendo los comerciantes y a la bajada de tipos de interés, que permite que "el consumidor tenga más dinero en el bolsillo".
"El 80% de los consumidores mantienen su poder de compra y, en cambio, se están comportando como si estuviéramos en la posguerra", lamentó el secretario general de la CEC, quien apeló a los ciudadanos a "actuar con racionalidad y pensar que consumir es importante para mantener los puestos de trabajo", no sólo del comercio, sino también de la industria, la logística o de los servicios.