
El gobierno belga ha decidido poner en marcha un nuevo plan de ayuda al grupo de banca y seguros KBC, cuyo balance está muy deteriorado por su elevada exposición en productos estructurados.
Según informa la agencia Belga, tras una reunión de urgencia, el Ejecutivo federal ha llegado a un acuerdo con la entidad para ofrecerle apoyo financiero, pero los detalles no serán revelados hasta mañana.
A punto de presentar sus resultados
KBC, cuya cotización fue suspendida este jueves, debe presentar sus resultados a primera hora de mañana, jueves.
El diario económico 'L'Echo' adelanta en su edición digital que la operación de rescate, en la que participarán tanto las autoridades federales como las flamencas, incluye una nueva inyección de capital, así como una garantía estatal.
Según el rotativo, KBC deberá en primer lugar contabilizar unas pérdidas de 1.600 millones de euros por su cartera de obligaciones de deuda colateral (CDO, en sus siglas en inglés).
En caso de que las pérdidas sean más elevadas, el Gobierno flamenco está dispuesto a inyectar a la entidad hasta 2.000 millones de euros.
Si rebasan los 3.600 millones, el Estado belga ofrecería una garantía que podría alcanzar los 10.400 millones de euros, con lo que quedaría cubierto el saldo total de la cartera de CDO en poder de KBC.
El grupo bancario y de seguros ya ha recibido en dos ocasiones asistencia de las autoridades, en forma de inyecciones de capital por un total de 5.500 millones de euros, ante el agravamiento de sus problemas derivados de la crisis financiera.