Flexibilidad. Ésa es la clave para los empresarios. Flexibilidad laboral que se traduce en que "se ponga sobre la mesa algo que incentive al pequeño y mediano empresario para que arriesgue su dinero y su capacidad al servicio de una empresa sin miedo", como sostiene, por ejemplo, Gonzalo Pascual, presidente del Grupo Marsans.
La recuperación económica y el freno a la sangría del desempleo pasa, en opinión de los empresarios, por establecer unas relaciones laborales más flexibles y acordes con el entorno competitivo que nos rodea.
Jesús Banegas, presidente de la Asociación Española de Tecnologías de la Información y Comunicaciones (Aetic), considera que "el máximo nivel de empleo se alcanzará cuando los perfiles profesionales de los trabajadores se adapten al estado tecnológico del quehacer económico y los salarios resulten competitivos".
Reclamaciones generalizadas
Y las patronales del motor también van en esa línea. Blas Vives, director general de Facoauto, ve necesaria la "flexibilidad laboral para que las pymes puedan mantener el máximo número posible de empleados".
Pero, ¿qué se entiende por flexibilidad delmercado laboral? Desde el Instituto de Empresa Familiar, que reúne al centenar de firmas más importantes de España, amén de otras mil a través de sus entidades regionales, concretan el asunto: "Condicionar los incrementos salariales a la productividad; modificar elmarco legal para que la estructura de las plantillas se pueda ajustar temporalmente a las necesidades de la producción; reducir drásticamente el absentismo y diseñar coherentemente el calendario laboral, trasladando algunas festividades".
Este centenar de compañías, que aporta el 26% del PIB va más allá y plantea: "Hay que bajar el coste del empleo". Y proponen hacerlo en dos puntos en las cuotas de la Seguridad Social que soportan las empresas por sus empleados y en 10 puntos en las que pagan por cada empleo fijo.
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