Francisco Orejudo, jefe del proyecto de obras de desdoblamiento de la autovía Palma-Manacor, y Gabriel Mestre, encargado de la vigilancia de las obras, pasarán esta noche en las dependencias del Cuerpo Nacional de Policía, adonde fueron llevados ayer detenidos en el marco de la operación Peaje que, a instancias de la Fiscalía Anticorrupción, investiga la comisión de presuntos delitos en la ejecución de la obra.
PALMA DE MALLORCA, 17 (EUROPA PRESS)
Según confirmaron fuentes policiales a Europa Press, los dos funcionarios podrían pasar mañana a disposición judicial, si bien no será hasta el jueves cuando se agote el plazo de 72 horas que la ley permite a la Policía retener a una persona detenida. Agotado este plazo, el detenido deberá ser puesto en libertad o a disposición judicial.
Así, Orejudo y Mestre fueron detenidos ayer junto a otras nueve personas, todas ellas relacionadas con las empresas que componen la UTE que ejecutó la carretera, una obra aprobada en la pasada legislatura por el Consell de Mallorca cuando gobernaba UM con los apoyos del PP. Sin embargo, tras prestar declaración ante la autoridad policial, fueron puestos en libertad con cargos.
Algo que no sucedió con los dos funcionarios de la Institución Insular, a los que la Fiscalía imputa sendos delitos de corrupción. Así, el Ministerio Fiscal imputa a Francisco Orejudo la comisión de presuntos delitos de malversación de caudales públicos, cohecho y falsedad documental, mientras que Gabriel Mestre es sospechoso de los delitos de malversación, cohecho, falsedad documental y prevaricación, informaron las mismas fuentes.
Así, la operación Peaje sigue abierta y, después de que ayer se realizaran sendos registros en oficinas relacionadas con las empresas constructoras, hoy los agentes del Grupo de Delincuencia Económica de la Policía Nacional sigue investigando con el fin de encontrar nuevos indicios de delito que permitan a la Fiscalía mantener su imputación.
Así, a las 14.00 horas de hoy los dos detenidos todavía no habían prestado declaración ante la policía, una comparecencia que tendrá lugar bajo la supervisión de los fiscales anticorrupción. En el caso de que tampoco declaren hoy, lo harán mañana, a fin de que el jueves puedan pasar a disposición del juez, agotando el plazo máximo que marca la ley.