Hace una semana los empresarios acudieron a Moncloa para exigir al presidente del Gobierno más financiación para las empresas, y parece que sus exigencias no cayeron en balde. El Gobierno aprobó ayer una nueva línea del ICO para las medianas empresas dotada con 6.000 millones de euros. La mitad de la cuantía será aportada por el Instituto de Crédito Oficial (ICO) y la otra mitad por las entidades financieras.
Las empresas que podrán optar a ella son las que se queden fuera de la Línea ICO para pymes. No obstante, la vicepresidenta, María Teresa Fernández de la Vega, no aclaró cuándo se pondrá en marcha. Como requisito, las empresas deberán realizar actividades de I+D al menos por el 1 por ciento de su cifra anual de negocio, mantener empleo neto y realizar actividades internacionales de al menos el 25 por ciento de su cifra de negocio. Las compañías que no superen los 4.500 millones de euros podrán solicitar créditos como máximo de 10 millones a devolver en tres años.
Con este gesto, el Gobierno intenta recobrar la confianza de los empresarios, tras los continuos enfrentamientos mediáticos entre el Gobierno y la patronal CEOE por la cuestión del abaratameinto del despido.
De la Vega aprovechó la intervención para evaluar el funcionamiento de la línea del ICO para pymes. Según la vicepresidenta, en los dos primeros meses del año se han otorgado créditos por 2.400 millones de euros destinados a pymes y autónomos.
Fomento del empleo
Otra de las medidas que se aprobaron ayer en Consejo de Ministros es el paquete de propuestas laborales de Corbacho. Tras un mes de negociación con los sindicatos y los empresarios, y después de que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, dijera que no se aprobaría ninguna medida de Trabajo sin el apoyo de los agentes sociales, el Gobierno ha dado la espalda a todos y ha aprobado una serie de reformas con el desacuerdo de los agentes sociales.
Entre ellas figura la bonificación a la contratación a tiempo parcial. Con esta medida, se reducen las cuotas sociales un 30% más que la duración de la jornada laboral. Es decir, para un empleado que trabaje el 50% de la jornada completa, el empresario recibirá una subvención del 80% en el pago de las cuotas sociales.
Por otra parte, flexibilizar los criterios para conceder aplazamientos de las cuotas de la Seguridad Social o bonificar el cien por cien de las cuotas sociales si se contrata a un parado, son otras de las medidas que ayer fueron aprobadas. En esta última, la bonificación recae en las cuotas sociales, que se compensará con el desempleo del trabajador. También se incluye en el Real Decreto el reforzamiento de los Servicios Públicos de Empleo con 900 empleados más y la supresión del mes de espera para el cobro del subsidio de paro cuando al parado se le agote la prestación.
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