
Los líderes de la Asociación de Naciones de Sudeste Asiático (ASEAN) aprobaron hoy políticas monetarias más liberales e hicieron un frente común contra el proteccionismo en la clausura de una reunión eclipsada por la peor crisis económica en décadas. Los miembros de la ASEAN -Indonesia, Tailandia, Singapur, Malasia, Birmania, Vietnam, Camboya, Laos, Brunei y Filipinas- hicieron público un documento en el que dan la bienvenida a políticas macroeconómicas expansionistas.
Entre estas medidas se incluyen estímulos fiscales, acceso al crédito y financiación del comercio, y medidas para estimular la demanda doméstica.
"Encaminados a este fin, hicieron hincapié en la importancia de coordinar políticas y tomar acciones conjuntas que se irían reforzando mutuamente en el ámbito regional", según anunció el comunicado que, sin embargo, no incluye ninguna política específica o acciones planeadas por la ASEAN para llevarse a cabo en el ámbito regional. También explicó que los líderes acordaron hacer un frente común contra el proteccionismo y se abstuvieron de introducir o incrementar nuevas barreras comerciales.
Solicitaron una "valiente y urgente reforma" del sistema financiero internacional, teniendo especial consideración con los intereses de los países en desarrollo.
Quieren revitalizar la ASEAN
La ASEAN ha comenzado con esta reunión a desarrollar un mapa que convertirá lo que solía ser un grupo ridiculizado basado en el consenso en un foro de debate para una comunidad de 570 millones de individuos que generarían un Producto Interior Bruto combinado de más de dos billones de dólares en los próximos seis años.
A pesar de la importancia de los Derechos Civiles en esta edición de la cumbre anual, inaugurada bajo el lema "Ruta de la ASEAN para los pueblos de la ASEAN", ya han comenzado a surgir los primeros problemas de comunicación entre los Gobiernos y los grupos sociales asistentes.
Concretamente, ni los representantes de los gobiernos de Birmania ni de Camboya han aceptado recibir a sus líderes sociales presentes en la cumbre, quienes han reaccionado con pesar.
La crisis financiera global y el creciente fantasma del desempleo en una región donde la pobreza está todavía afianzada han eclipsado los Derechos Humanos y Birmania, asuntos que solían ser el foco de atención en estas cumbres.
Los líderes de la ASEAN instaron a la Junta militar que gobierna Birmania a continuar cooperando con el enviado especial de Naciones Naciones así como con el relator especial de la ONU para los Derechos Humanos, según apuntó el comunicado.
La mayor consecuencia de las reuniones fue de la firma de un tratado de libre comercio entre los miembros de la ASEAN, Nueva Zelanda y Australia que podría significar 48.000 millones de dólares (casi 37.900 millones de euros) a las economías de la región.