BARCELONA, 25 (EUROPA PRESS)
La dirección de Nissan y el comité de empresa alcanzaron hoy un acuerdo sobre el plan de viabilidad para Barcelona, basado en la garantía de un nuevo vehículo para 2012 y carga de trabajo hasta entonces.
Aunque el acuerdo no lo especifica, los sindicatos cuentan con que esta carga de trabajo se base en la próxima asignación a la planta catalana de la furgoneta que, en principio, debía producirse en Tánger (Marruecos), proyecto que ha quedado en suspenso.
Según el portavoz de Nissan, Alfredo Castaño, la consecución de un acuerdo con el comité supone "acercar la decisión" de que Barcelona sea la adjudicataria de esta nueva furgoneta. "Estamos convencidos de la confianza de Nissan y esperamos una respuesta positiva antes del 31 de marzo", añadió.
Castaño aseguró que hoy se alcanzó "el pacto sobre el futuro de Nissan en Catalunya durante muchos años", aunque reiteró la necesidad de llevar a cabo una adecuación de la plantilla, que confió en llevar a cabo "trabajando conjuntamente con los sindicatos".
El nuevo producto será un vehículo del segmento B o C, según la compañía, que cifró en 250 millones de euros la inversión necesaria para acoger esta producción. En total, la inversión prevista para el periodo 2011-12 en Barcelona alcanzará los 400 millones de euros.
ADECUAR LA PLANTILLA
El acuerdo alcanzado comporta la continuidad de algunas medidas ya en marcha y la creación de otras nuevas con el objetivo de llevar a cabo esta redimensión que garantizará una plantilla mínima de 2.800 trabajadores, lo que ahora mismo dejaría fuera a unos 1.400 empleados.
Según explicó el portavoz de CC.OO. en el comité, Javier Pacheco, el hecho de que los 2.800 empleados sea una cifra mínima garantizada y un tope máximo como planteaba la dirección hasta ahora implica que habrá margen para que el volumen final de plantilla se diseñe "de acuerdo con el volumen de producción y, por lo tanto, la carga de trabajo que exista".
No obstante, la salida de trabajadores de la planta catalana es inevitable, por lo que sindicatos y Nissan pactaron continuar con el plan de bajas voluntarias incentivadas y alargar el periodo para inscribirse hasta el 31 de marzo. Hasta la fecha hay poco más de una veintena de trabajadores apuntados.
Asimismo, Nissan pondrá en marcha un plan de prejubilaciones para todos los empleados que, a finales de marzo, tengan 55 años o más. Esto afectará a unos 170 trabajadores, según el comité.
Para el resto de la plantilla, la multinacional nipona propuso una prórroga del ERE temporal en marcha en la factoría y que afecta a unas 3.000 personas. Así, el expediente se prolongaría hasta el 31 de julio con una afectación similar al actual, según Nissan.
Tras la firma del acuerdo, la consellera de Trabajo, Mar Serna, consideró que, ante la situación actual, el objetivo es garantizar "el mayor número de puestos de trabajo", por lo que reconoció que algunos "tendrán que dejar la empresa".
No obstante, subrayó que el pacto "abre una nueva etapa" y consideró una "buena noticia" el compromiso de ambas partes para buscar soluciones "a través del diálogo y el consenso" y minimizar estos "efectos no deseados" para garantizar el futuro en Barcelona.