Madrid, 15 nov (EFECOM).- El presidente de la CEOE, José María Cuevas, aseguró hoy en la Asamblea General de la patronal que esta organización "seguirá defendiendo la indisoluble unidad de la nación española, por encima de circunstanciales y extrañas definiciones".
En su primera aparición pública tras haber estado hospitalizado durante once días, Cuevas presidió la Asamblea que aprobó por unanimidad los nuevos estatutos y el código de buenas conductas de la patronal, y pronunció un discurso cargado de contenido político.
Así, aunque consideró que España "va razonablemente bien en lo económico" y "existe una moderada concordia en lo social", dijo observar "con temor" la "evolución del resto de las cuestiones públicas", entre las que citó el debate territorial, la política de inmigración y relaciones internacionales y "las negociaciones emprendidas para el cese del terrorismo".
En su opinión, la organización alerta de forma "continuada" de los "grandes riesgos" que pueden amenazar el buen momento económico de España, tales como la paulatina pérdida de competitividad, la ruptura de la unidad de mercado o la falta de seguridad jurídica que tienen las empresas tanto dentro como fuera del país.
Cuevas aseguró que la CEOE seguirá defendiendo la libertad de asociación y el respeto a la autonomía de sus organizaciones y el diálogo social como un método "efectivo" para introducir reformas.
La Asamblea General de la CEOE ratificó por unanimidad la reforma de sus estatutos, sus presupuestos para el 2007 y el "Código de Buenas Prácticas", que ya había aprobado su junta directiva, a la que Cuevas, entonces hospitalizado, no pudo asistir.
Según explico el presidente de la patronal, al frente de este organismo desde 1984, los nuevos estatutos pretenden "poner al día" normas de funcionamiento de datan de 1997 y que son "distintas y más limitadas" que las que ahora se plantean.
Además, con la reforma se pretende "enriquecer" la participación de las empresas y de las organizaciones en la vida confederal y en los órganos de gobierno de la CEOE, así como dotar a la citada organización de una "mejor" gestión organizativa.
En cuanto al Código de Buenas Prácticas, señaló que "velará por la coherencia de los comportamientos de los integrantes de la CEOE" para que haya una "voz y presencia únicas" ante terceros y ante las múltiples organizaciones que la componen.
Según el presidente de la patronal, a lo largo de los treinta años de vida de la organización empresarial, la CEOE se ha convertido "en una referencia", no sólo en España, sino también en Europa y en Iberoamérica, gracias a su papel de interlocutor con los Gobiernos y los agentes sociales.
Cuevas añadió que aunque se produzcan cambios dentro de la organización, seguirán plenamente vigentes los principios esenciales de independencia del poder político o social, de defensa de la libertad de empresa, así como de la unidad de mercado en España y en Europa.
El secretario general de la organización, José Luis de la Monja, aludió por su parte a la reforma laboral, al señalar que "no es seguramente lo que deseaban los empresarios, aunque por lo menos sí nació de un consenso".
Por otra parte, recordó que los empresarios discrepan con la Ley de Igualdad porque obliga a las empresas de más de 250 trabajadores a que en sus convenios colectivos desarrollen un plan de igualdad, así como a que en ocho años, las plantillas de las empresas tengan un cuarenta por ciento de mujeres.EFECOM
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