El crecimiento de la economía francesa sufrió una contracción del 1,2% en el último trimestre de 2008 y el Gobierno galo espera una recesión para 2009 de, al menos, el 1%, según indicó en un comunicado la ministra francesa de Economía, Christine Lagarde. "Como en todos los países desarrollados, la actividad en Francia ha bajado significativamente debido a la crisis financiera", señaló.
La caída en términos interanuales fue del 1%. Esta contracción es la mayor desde que existen datos comparables, 1978, y está en línea con lo esperado por los analistas consultados por Bloomberg.
Las exportaciones cayeron un 3,7%, mientras que las importaciones lo hicieron un 2,2%. La inversión empresarial retrocedió un 1,5%, aunque el consumo aumentó un 0,5%. En el tercer trimestre, la economía francesa todavía consiguió expandirse un 0,1%.
Lagarde explicó que, después de haber sido "uno de los escasos países europeos en los que la actividad aumentó en el tercer trimestre, Francia ha sufrido a finales de 2008, como sus vecinos europeos, los efectos desfavorables de la crisis financiera que estalló el pasado septiembre".
Estas cifras reflejan de manera mecánica el descenso del cuarto trimestre de 2008 y "no significan", según Lagarde, que la situación vaya a continuar agravándose en los próximos meses. La ministra presentará a principios de marzo el escenario completo de las nuevas previsiones macroeconómicas actualizadas.
A su juicio, la "mala cifra" registrada a finales de 2008 refleja una disminución de existencias muy importante en las empresas, signo de expectación frente a una coyuntura difícil, y la crisis del sector del automóvil pero sostiene que una parte nada despreciable de estos factores es "temporal". Por el contrario, el consumo de los hogares muestra una "resistencia notable", al haber aumentado un 0,5%.