Suecia también tendrá su propio plan de rescate bancario. Hoy, el Gobierno sueco ha anunciado que inyectará hasta 50.000 millones de coronas suecas (4.650 millones de euros) en el sector financiero del país con el objetivo de estimular de nuevo la concesión de préstamos a de los bancos a los hogares y empresas.
El plan de capitalización ideado por el Ejecutivo escandinavo podría imponer la congelación de salarios y primas en los bancos que se beneficien de la ayuda durante un periodo de dos años, y se financiaría a través del fondo de estabilidad creado por el Gobierno sueco a finales del año pasado, cuyo volumen alcanza los 150.000 millones de coronas (13.962 millones de euros).
Necesidad de capital
"Aunque los mercados de capital ya hayan empezado a funcionar mejor, a las compañías todavía les resulta muy difícil acceder al crédito que necesitan", señaló el ministro de Mercados Financieros, Matts Odell. Según indicó, la cantidad creciente de impagos y las elevadas necesidades de capital "llevarán a una nueva restricción de crédito si no se inyecta más capital".
La economía sueca entró en recesión en el tercer trimestre de 2008 y las previsiones auguran una contracción del 2% para este año, en lo que ya es su peor situación económica en 15 años. "La crisis financiera nos ha golpeado con dureza", reconoció el ministro de Finanzas sueco, Anders Borg, quien reconoció la dependencia de las empresas exportadoras suecas de los grandes bancos internacionales.
Asimismo, el responsable sueco de Finanzas auguró que podrían pasar entre seis y doce más antes de que los mercados financieros vuelvan a operar con normalidad.
Suecia se quejaba el pasado mes de diciembre de la actitud poco "constructiva" de Bruselas ante los planes de ayuda a la banca de los Gobierno europeos. "Pedimos a la Comisión revisar de inmediato los proyectos de garantía y recapitalización bancarias, y pensamos que necesitamos una actitud mucho más constructiva de la Comisión", señalaba Borg.