Pruebas

Maserati Ghibli S Q4: pasión razonable

Tiene un motor V6 biturbo de 410 CV, tracción integral y tanto su diseño como su sonido son claramente inconfundibles. Ponemos a prueba al Maserati Ghibli S Q4, la nueva berlina de acceso a la gama del tridente, pero en su versión más completa.

No es la primera vez que Maserati recurre a la denominación Ghibli. Tanto a finales de la década de los 60 como a mediados de los 90 existieron dos modelos que respondían a esta denominación. Curiosamente, poco tenían que ver con Ghibli actual, ya que ambos tenían carrocería coupé de dos puertas. El nuevo, en cambio, es una berlina de cuatro puertas, cuya pretensión es situarse como escalón de acceso a la gama, justo por debajo del Quattroporte. De hecho, podríamos decir que es algo así como un mini Quattroporte que va en busca de otro tipo de cliente, quizá más joven.

Pero ojo, que en realidad de pequeño no tiene nada. Sus 4,97 metros de longitud, su generosa distancia entre ejes y su tremenda anchura lo convierten en un coche grande. Para hacerse a la idea de sus dimensiones, este Maserati es muy similar a un Porsche Panamera en todas sus cotas exteriores, lo que ya es mucho decir.

Quizá por este motivo al acceder al interior esperábamos un habitáculo de proporciones acordes, pero lo cierto es que no hay tanto espacio como debería. Sobre todo en las plazas traseras, que parecen quedarse un poco cortas si se comparan con las de algunos rivales. Otras cifras, como las del maletero (500 litros), resultan más correctas y cercanas a la media del segmento.

Una vez sentados a bordo nos envuelve un clima premium con claro sabor italiano, en el que destacan las pieles de calidad que recubren salpicadero, asientos y puertas, así como un diseño limpio y moderno, en el que casi todas las funciones se manejan de forma táctil. La pantalla que preside la consola central toma protagonismo y permite controlar todo lo que tiene que ver con el climatizador, el equipo de audio, el teléfono y demás, sin apenas un sólo botón. Botones que sí aparecen en la zona del cambio y que se reservan a sistemas como el control de estabilidad, el modo Sport, el modo manual de la transmisión, la puesta a punto de suspensión y el modo de conducción eficiente.

¿Está a la altura del espíritu Maserati?

Y ahora vamos a lo realmente importante. ¿Está el nuevo motor V6 3.0 biturbo de 410 CV a la altura de las circunstancias? Hay que tener en cuenta que el todo Maserati que se precie, además de un diseño emocionante, debe tener alma. Esto es algo que no se puede perder y, acostumbrados a los V8 de más de 4 litros que dan vida al resto de modelos de la marca teníamos cierto miedo de que el nuevo motor fuese un poco descafeinado. Pero no, si atendemos a las prestaciones, son iguales o incluso superiores en algunas mediciones a las de un Gran Turismo Sport con motor V8 de 460 CV.

En cuanto al sonido, ese bramido inconfundible y salvaje que siempre emite un Maserati , aquí también está presente. En realidad se debe al sistema de escape, que permite dar mucho o poco la nota, en función de si llevamos activado o no el modo Sport, algo que le da una doble personalidad muy interesante. Lo que está claro es que cuando se encuentra bajo los efectos de Mr Hyde no hay V6 en el mercado que lo iguale en sonido. Bravo por los italianos, que saben emocionar como nadie.

Por cierto, no nos olvidamos de citar que este propulsor se asocia a un cambio automático de convertidor de par con ocho velocidades y a un sistema de tracción integral denominado Q4, que funciona de forma rápida y suave el primero, mientras el segundo mejora la motricidad, algo importante en un coche cuyo motor tiene una respuesta tan rabiosa. En cualquier caso, también se puede elegir con con tracción trasera. Se pierde agarre, pero se ahorra peso y dinero.

Llega el momento de despedirse del Ghibli y no podemos evitar preguntarnos si tiene sentido entre tanta y tan buena berlina premium alemana. La respuesta es que, probablemente, sí. La exclusividad y la pasión de un Maserati no se encuentran en otros coches.

Ficha técnica

Motor: 6 cilindros en V, biturbo

Combustible: Gasolina

Potencia: 410 CV

Tracción: integral

Dimensiones: 4.971 x 1.945 x 1.461 mm

Batalla: 2.998 mm

Capacidad maletero: 500 litros

Consumo medio: 10,5 l/100 km

CO2: 246 g/km

Precio: 97.010 euros

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