Solo apto para manos ávidas de curvas, capaces de aprovechar una relación peso potencia de casi 2kg/CV y disfrutar de unas sensaciones únicas. El Bultaco Linx saldrá al mercado el año que viene con un precio cercano a los 100.000 euros.
Si Paco Bultó levantara la cabeza, casi seguro no podría dar crédito a los nuevos modelos que hoy desarrolla la compañía que él mismo fundara hace casi 60 años. Si hace apenas unos meses conocíamos la Bultaco Brinco, una suerte de moto-bici o viceversa, de aspecto offroad y movida por un motor eléctrico, hoy toca dar la bienvenida al Bultaco Linx, el primer coche de la historia de la marca.
Y no es un coche cualquiera, se trata de un modelo muy deportivo, tipo barqueta moderna, del estilo del KTM X-Bow. La firma española ha dado la sorpresa en el reciente Salón de Milán EICMA (sorprende que haya sido en un evento dedicado a la motocicleta), donde los asistentes han podido ver en vivo la consecución de un proyecto que llevaba ya unos años fraguándose. El padre de la criatura es el ingeniero Miguel Ángel Rodriguez, director de Bultaco Cars, quien ha logrado reunir los valores tradicionales de la marca -deportividad, pasión y diversión- en un vehículo "con unas prestaciones que garantizan unas sensaciones únicas a todos los usuarios y amantes de Bultaco".
El Bultaco Linx, que, por cierto, debe su nombre al lince ibérico, tiene un chasis de aluminio muy ligero. Apenas 67 kilogramos pesa la estructura sobre la que se asienta una carrocería de composite y un entramado mecánico, que, juntos, alcanzan un peso total de 850 kilos en orden de marcha (con todos los fluidos, conductor y equipaje incluidos). Un peso realmente bajo, sobre todo en relación a la potencia que desarrolla el coche.
En las entrañas del primer coche de Bultaco se esconde un motor del grupo Volkswagen. Se trata del cuatro cilindros 2.0 TSI, sobrealimentado con turbo, que entrega hasta 400 CV y se asocia a la transmisión DSG de seis velocidades. Cambio secuencial, autoblocante para optimizar la tracción, unas cifras de aceleración y velocidad máxima de 3,7 segundos (0-100 km/h) y 280 km/h (autolimitada)... En fin, un auténtico bombazo para los amantes de los track day. Pocos coches se nos pasan por la cabeza capaces de hacerle sombra, aparte del KTM que ya mencionábamos unas líneas antes, el Lotus 3-Eleven o el Ariel Atom, similares por concepto.
Este deportivo biplaza, que calza neumáticos Dunlop SportMaxx RT2 en medida 205/40 R17 delante y 265/35 R18 detrás, se encuentra ya en fase de homologación para salir al mercado a finales del año que viene o principios de 2018.