Linda Jackson, CEO de Citroën, ha sido la encargada de abrir el acto de presentación del nuevo C3, un modelo que, sin lugar a dudas, es importante para la marca. Lo dicen las propias cifras: el año pasado supuso el 14% de las ventas globales de la marca.
Además, uno de cada tres coches vendidos en Europa pertenece a este segmento (y de estos, el 90% se vende en versión de cinco puertas). Así que, efectivamente, había que prestarle especial atención al pequeño C3.
Nuevo modelo, nuevos objetivos
La nueva generación mide 3,99 metros de longitud, tiene un maletero de 300 litros y esconde cinco plazas en su interior. Entre sus objetivos figura una intención de fidelizar a los clientes que ya conocen la marca, pero no sólo eso. El nuevo C3 es ahora más amplio de miras: llegar a nuevos clientes y rebajar la edad media de sus compradores aparece entre sus nuevas prioridades. ¿Cómo lograrlo? Con un diseño diferenciador y mucha tecnología, entre otras cosas.
Basta con echar un vistazo a la carrocería del nuevo C3 para ver que ha cambiado, y mucho. Su referencia en este sentido ha sido el Citroën C4 Cactus, del que hereda la imagen frontal, la disposición del interior, los protectores exteriores de la carrocería (airbump) o los tiradores interiores de las puertas. Es evidente que Citroën quiere seguir exprimiendo esa nueva línea de diseño, algo atrevida y nada conservadora, que de alguna manera le está dando la vuelta a su imagen. La idea es mantener los valores de siempre (tacto de conducción confortable, practicidad, amplitud), pero ampliarlos con un diseño y una dotación capaces de llamar la atención de un público joven y divertido.
Visto en vivo recuerda al Cactus, pero mejorado. Sus líneas están más pulidas y, de alguna manera, parece más dinámico y musculado. Pero quizá sea el interior lo que más destaque en el nuevo C3. Los nuevos materiales de recubrimiento (le dan un aspecto bastante curioso, casi premium nos atreveríamos a decir), el salpicadero de disposición horizontal y la pantalla táctil de gran tamaño que preside la consola definen un interior limpio, ordenado, moderno y personalizable, muy apetecible en cualquier caso. Lo cierto es que no vemos rastro alguno de ese ambiente aburrido y pobre tan propio de los modelos generalistas. Bien por Citroën, que ha sabido dar un paso adelante en este apartado.
Llegará a final de año
Del apartado dinámico poco podemos contar a estas alturas, ya que el coche se ha presentado en un evento estático (hasta octubre no está prevista la prueba dinámica para la prensa especializada), pero sí podemos decir que los responsables de Citroën hablan de un tacto de conducción en el que prima el confort.
Esto es algo que siempre ha caracterizado a los Citroën y que forma parte de esos rasgos que el nuevo C3 quiere preservar como parte de la herencia de marca. Será un coche cómodo en la carretera, con una suspensión capaz de absorber las irregularidades del terreno mejor que muchos otros, aunque seguramente con un punto de dinamismo inferior al de algunos rivales.
En cuanto a los motores, la gama está definida por cinco opciones: tres gasolina 1.2 (PureTech tricilíndricos) con 68, 82 y 110 CV, y dos diésel BlueHDI, con 75 y 100 CV. Estas serán las opciones que abrirán la gama cuando el C3 llegue al mercado a finales de año, aunque más adelante podría ampliarse. La eficiencia parece una de las grandes preocupaciones de la marca con esta oferta mecánica en la que todos los propulsores son de baja cilindrada y arrojan unas cifras de consumo y emisiones muy contenidas. La caja de cambios automática EAT6 -convertidor de par- es otra de las novedades que se suman a la oferta mecánica del C3.
Precios por confirmar
En la dotación tecnológica no faltan sistemas como el mantenimiento de carril, la vigilancia de ángulo muerto, el acceso y arranque sin llave o la conectividad móvil vía Apple Car Play y Android Auto. Un elemento que llama especialmente la atención es la cámara de vigilancia ubicada tras el retrovisor interior, que permite al conductor grabar ?e incluso compartir en redes sociales- lo que sucede delante del coche mientras viaja. Entre sus funciones destaca una que, cuando se produce un accidente, graba en el disco duro los 30 segundos anteriores y el minuto posterior a que se produzca el siniestro con el fin de registrar todo lo sucedido.
El nuevo Citroën C3 llegará al mercado a finales de 2016, probablemente durante el mes de noviembre. Sus precios aún no están definidos. Además de este modelo, Citroën prevé lanzar otros cuatro modelos en los próximos 18 meses. Su idea es abarcar todos los segmentos con ocho coches que, sin descuidar su condición generalista, buscan ser audaces para captar a una clientela diferente.