Parece salida de una película de ciencia ficción, pero es real. La moto más bestia que uno se pueda encontrar pertenece a la firma Lazareth y se mueve con un motor V8 de 470 CV.
Si algo tiene el Salón de Ginebra es que en sus múltiples stands hay hueco para todo. Aparte de SUV's, deportivos y demás novedades medianamente normales, uno se puede encontrar verdaderas locuras sobre ruedas como esta especie de motocicleta que responde al nombre de Lazareth LM 847.
Lazareth es un preparador francés que, de vez en cuando, nos sorprende con creaciones imposibles. Pero lo que acaba de presentar en el Salón de Ginebra es de locos. Se trata de una moto con motor Maserati V8 de 4,7 litros de cilindrada, que toma directamente prestado del modelo Gran Turismo. Este propulsor entrega 470 CV a 7.000 rpm y 620 Nm a 4.750 rpm. ¿Y cómo es posible transmitir semejante empuje al suelo? La clave está en que esta moto tiene cuatro ruedas -dos por cada eje- y las traseras, que son las encargadas de la tracción, no son precisamente pequeñas. Cada una de ellas es un enorme donut de 200 milímetros de ancho, una medida digna de una superdeportiva actual.
Otras curiosidades de la Lazareth LM 847 son su transmisión directa, que carece de cambio de marchas, su compleja suspensión capaz de mantener en orden los 400 kilos de peso de la moto, su enorme distancia entre ejes (1.850 mm) e incluso el hecho de que el motor sirve como pieza estructural, ya que sobre él se articulan los dos basculantes y el colín, que, por cierto, es de una Ducati Panigale.
Una moto con un motor enorme o un motor pegado a una moto, como cada uno prefiera, el caso es esta Lazareth ha conseguido girar las cabezas de los visitantes del Salón de Ginebra. ¿Su precio? Unos 200.000 euros. No es poco, pero dada su espectacularidad y la artesanía que esconde tras de sí, parece incluso una cifra coherente con lo que representa.