Que los fabricantes sigan apostando por pequeños deportivos de acceso como el nuevo Suzuki Swift Sport es una estupenda noticia, porque nos hace pensar que aún hay esperanza para los que disfrutamos conduciendo, ya que demuestra que hay vida más allá de la ultraeficiencia y lo políticamente correcto dentro del complejo escenario de cambio en el que nos encontramos.
El pequeño Swift siempre ha proporcionado diversión al volante. Ágil, ratonero y veloz, su misión ha sido desde el origen levantar sonrisas a bordo, dejando quizá a un lado otros aspectos como la practicidad. Con el nuevo modelo se mantiene la filosofía de la deportividad asequible, pero ojo, porque poco tiene que ver este Suzuki con sus predecesores (vamos ya por la cuarta generación). Sobre todo, en términos de motor, amplitud y equipamiento.
Como en esta vida hay que priorizar, empezaré hablando del motor, que es una de las principales razones del coche. Si en el anterior Swift había un 1.6 atmosférico de 136 CV ,muy juguetón en la parte alta del cuentavueltas, pero con una capacidad de empuje sólo normal (entregaba un par muy contenido), en el relevo generacional nos encontramos algo diametralmente opuesto: un 1.4 turbo 'Boosterjet', que se muestra mucho más pleno en todo el rango de revoluciones.
Si al anterior había que exprimirlo hasta girar como un molinillo cerca del corte de inyección para encontrar algo de vidilla, a este le basta con moverse entre el bajo y el medio régimen para ofrecer buenas dosis de aceleración. Y también da bastante de sí al subir las revoluciones más allá de la franja media. Así que, sintiéndolo mucho por los nostálgicos y amantes de los motores de aspiración, este 'Boosterjet' parece todo un acierto porque hace que el coche responda mejor y de una manera más eficiente. Además, es la tendencia a seguir en materia de motores, así que no hay más vuelta de hoja.
Ficha técnica del nuevo Suzuki Swift Sport
Cilindrada: 1.373 cc
Potencia: 140 CV
Par máximo: 230 Nm (2.500 – 3.500 rpm)
Aceleración 0 – 100 km/h: 8,1 segundos
Velocidad punta: 210 km/h
Consumo medio: 5,6 litros /100 km
Cambio: manual, 6 velocidades
Peso: 1.045 kilogramos
Dimensiones (largo x ancho x alto): 3.890 x 1.735 x 1.495 mm
Destacamos el apartado del peso porque es un elemento clave. Su tonelada escasa es la responsable de que las prestaciones sean tan buenas y la respuesta del coche, tan ágil y divertida. Ya lo decía Colin Chapman, fundador de Lotus -nada tiene que ver con Suzuki-: "el peso es el enemigo para hacer un coche competitivo". Efectivamente, la ligereza es una ventaja en los coches de aspiraciones deportivas. Por ello, el Swift Sport se mueve bien entre curvas, de forma fluida y con unas inercias bien contenidas. La puesta a punto de chasis es equilibrada y el ligero aumento de la batalla (distancia entre ejes) le ha dado un punto más de aplomo.
En realidad, la plataforma Heartec de nuevo desarrollo es la culpable de que el coche vaya tan bien en líneas generales. Que nadie vaya a pensar que es un coche de tacto radical. Nada más lejos de la realidad. Es, de hecho, un modelo que tira a confortable, pero siempre prestacional y divertido. Un pequeñín para desfogarse a gusto cuando sea necesario, pero perfectamente cumplidor en los desplazamientos del día a día.
En este sentido, el Swift Sport es más amplio que antes, especialmente en las plazas traseras, donde además hay tres plazas homologadas frente a las dos de la generación anterior. Es decir, que ahora es un coche para cinco personas. También el maletero ha crecido de 211 a 265 litros.
Diseño y equipamiento
La nueva generación incluye un frontal potenciado, una parrilla exclusiva, llantas de 17 pulgadas de diseño específico, paragolpes más musculosos y unas dimensiones que lo convierten en un modelo más ancho y bajo, algo que transmite una mayor deportividad a la vista.
El interior es más moderno, con un salpicadero mejor integrado, nuevos materiales de mayor calidad (aunque carece de zonas blandas en el salpicadero) y todo con un cierta orientación hacia el conductor. Como elementos distintivos de la versión Sport frente al resto de la gama Swift figuran el volante de cuero, las esferas rojas de la instrumentación, los pedales de aluminio, los asientos deportivos envolventes y selector del cambio de aspecto deportivo. Por cierto, el cambio es manual y de seis velocidades bien escalonadas, pero el tacto es algo mejorable. Más firmeza en el guiado le sentaría genial para redondear la experiencia de conducción. Tampoco el tacto de la dirección me ha parecido de diez. Pero poco más que objetar ya que, en líneas generales, es un coche bien diseñado y ejecutado.
En materia de equipamiento llegan elementos como la pantalla táctil de un sistema de infotainment que permite enlazar el teléfono al coche mediante Apple Car Play / Android Auto, además del climatizador, las luces automáticas, el volante calefactado y ciertos asistentes a la conducción como el de cambio de carril, el de luces largas, el control predictivo de la frenada o la alerta antifatiga.
Ya disponible, el nuevo Suzuki Swift Sport llega a los concesionarios en cuestión de días con un precio de 21.370 euros que, gracias al descuento promocional de 2.000 euros que ahora se aplica, se queda en 19.370 euros.