
Que los vehículos no se hacen en un día no es ninguna sorpresa, pero quizá no mucha gente sepa que el coche que hoy vemos en la calle se ha empezado a diseñar, como mínimo, cinco años antes. Esto obliga a los equipos de trabajo implicados a mirar con ojos de futuro, ya que su obra terminará plasmándose mucho tiempo después de coger los lápices por primera vez. Audi abre las puertas virtuales de su centro de diseño para contarnos cómo diseña sus coches y cuáles los pasos que siguen para completar el proceso.
Fase inicial
En la fase inicial se define el lenguaje básico del modelo en cuestión y de toda la familia que formará su gama. Es decir, aquí se da forma a las líneas maestras de un modelo en todas las variantes de carrocería que pudiera tener: berlina, coupé, cabrio, familiar… En este momento, diseñadores, equipo de ventas y desarrolladores técnicos trabajan de manera conjunta. Se hacen modelos a escala 1:10 mediante impresiones en 3D y, finalmente, se acaba fabricando una maqueta a escala 1:1 en poliuretano. Este proceso puede durar entre tres y cuatro meses y, contrariamente a lo que pudiera parecer, no se trata tanto de definir el propio diseño al detalle como de dejar a la vista los volúmenes, las proporciones y analizar dónde se colocarán los sensores de ciertos dispositivos tecnológicos.
Los bocetos
En la segunda parte del proceso, que dura unos dos meses, los diseñadores se sientan a trabajar con papel y lápiz por un lado y, por otro, establecen mesas digitales. Un equipo de entre ocho y nueve personas se centran en el exterior, mientras que otro equipo de siete personas se dedican al interior. Es una especie de competición en la que las mejores ideas van pasando fases hasta dar con la más interesante.
El diseño digital
Hace un tiempo hubiera sido impensable, pero ahora es posible proyectar las creaciones CAD a escala real sobre unas pantallas -que son más bien paredes- de entre 5,5 y 11 metros de ancho. Esto permite comprobar con calidad fotorrealista la coherencia de unos diseños que, acto seguido, pueden ser rápidamente transferidos a maquetas físicas a escala 1:1.
Estas maquetas se hacen realidad gracia a unas máquinas de fresado que moldean la arcilla hasta dar con la forma básica del coche. El detalle final queda en manos de los diseñadores, que rematan de forma artesanal las superficies del coche. Audi considera indispensable el toque humano y emocional durante el proceso.
El diseño artesanal
En la siguiente etapa, los modelistas en CAD y en arcilla de Audi transforman el diseño en un modelo artesanal. La estructura invisible de los modelos de arcilla consiste en un bastidor de acero con una suspensión de altura ajustable, paneles de madera y una carrocería realizada en espuma rígida. La capa exterior de plastilina industrial es de unos 30 ó 40 mm de grosor. Mientras esta arcilla está almacenada en el horno del laboratorio, es blanda como la mantequilla caliente. Se endurece rápidamente en el ambiente de la sala de modelado y se puede trabajar con distintas herramientas.
Interior y dimensiones
La percepción de calidad, el tacto y, en general, todo lo que tiene que ver con el habitáculo cobra especial relevancia en marcas como Audi. El cliente de una firma premium espera lo mejor, así que hilar fino en este apartado es clave. Todo el diseño interior obedece a una temática central, que se repite desde la forma más básica hasta cada detalle singular. Es algo así como un hilo conductor, presente en cada rincón del coche.
En esta fase se crean tres maquetas de espuma en escala 1:1. Sobre la base de estos modelos sin techo que anticipan la estructura, los departamentos técnico y de diseño comprueban las proporciones, la ergonomía y las dimensiones. El objetivo es alojar los numerosos componentes del interior, como el aire acondicionado, los airbags o iluminación de guía mediante LED. Hasta 50 departamentos especializados están implicados en este proceso.
Los encargados del departamento de viabilidad crean un modelo consecuente con los diseños particulares exterior e interior. Después, confirman que funciona en términos de producción, servicio, seguridad y calidad a largo plazo, y finalmente le dan el ok a esta fase.
Diseño de la interfaz gráfica de usuario (GUI)
En unas instalaciones específicas, los diseñadores de la interfaz GUI en Audi trabajan estrechamente con el departamento de desarrollo técnico para decidir, por ejemplo, cómo estructurar el árbol de menús, qué funciones debe contener, cuál es el tamaño adecuado para los iconos o cómo deben combinar los tonos de los gráficos con el lenguaje interior del coche.
Colores y materiales
Una vez que las primeras maquetas de espuma del exterior y el interior se han puesto juntas, los diseñadores de colores y acabados se embarcan en un nuevo proyecto y empiezan a trabajar en los conceptos de colores y materiales.
El departamento de colores y materiales también produce modelos a escala 1:1 para los componentes mayores, como el salpicadero, la consola central o los asientos. Estos últimos, en particular, tienen incorporados los detalles de las costuras, el patrón, las perforaciones y las combinaciones de colores. Las nuevas y vanguardistas herramientas de Audi para la visualización también hacen más fácil poner todos esos elementos en conjunto. Sin embargo, las herramientas más importantes siguen siendo los ojos y dedos que, altamente sensibles, pueden apreciar hasta el más mínimo matiz en el color en términos de brillo y profundidad. Se tarda años en entrenar completamente estas habilidades.