
La alcaldesa de París, Anne Hidalgo, pretende hacer frente a la contaminación con una revolucionaria iniciativa: taxis voladores. Es la nueva arma contra la polución y que podrá verse sobre las aguas del Sena en los próximos meses.
Este novedoso invento lo ha creado Alain Thébault, un velero capaz de volar a bajar altitud y a determinadas velocidades. "Mi Sea Bubbles es un vehículo que podrá funcionar en todas las grandes ciudades con río, como es el caso de París, Londres o Berlín. Podrá utilizarse como vehículo privado o como taxi. Es capaz de navegar y volar sobre un río, el Sena, en este caso. Un medio de transporte ecológicamente perfecto", explica.
Y es que en las calles de París existen varias arterias que sufren atascos muy prolongados, además de los cierres de grandes avenidas históricas, como la calle de Rivoli, y de un aumento en las multas de aparcamiento, que pasarán de 17 a 50 euros en varios distritos de la capital.
Precisamente la alcaldesa Anne Hidalgo será la primera usuaria en probar el Sea Bubbles, a título experimental. "Sé nadar, claro. Pero confío en el proyecto de Thébault. Sus pequeños vehículos voladores, entre el barquito y el coche utilitario, eléctricos y ecológicos, podrán aportar mucho a la mejora del aire de París. Comenzaremos por hacer algunas pruebas. Y, a partir de ahí, estudiaremos su utilización más o menos generalizada»
Las pruebas desde el Consistorio parisino deberán prolongarse durante varios meses. Si los resultados son positivos, que se espera que sí, podrán lanzarse dos versiones de estos taxis voladores: una versión taxi y una versión más clásica de un coche eléctrico que los usuarios puedan alquilar para trayectos cortos.