
Toyota ha anunciado que está trabajando en desarrollar baterías de ion-litio que incrementarán la autonomía de los vehículos un 15%, lo que posiciona al fabricante japonés en una posición privilegiada en la carrera por introducir los vehículos eléctricos capaces de recorrer distancias lo suficientemente extensas como para conquistar una mayor cuota de mercado.
La firma ha desarrollado un método para analizar y abordar el deterioro en el rendimiento de las baterías de ion-litio, lo cual abre camino para el desarrollo tanto de tecnologías que mejoren el rango de conducción de los vehículos como la vida útil de la batería en algunos años, tal y como aseguró Hisao Yamashige, ingeniero jefe de la división de investigación y desarrollo de la marca.
Toyota, líder en tecnologías híbridas convencionales y partidario de los coches propulsados con pila de combustible, ha empezado a dividir sus esfuerzos en potenciar las tecnologías limpias del futuro. Por un lado, ha creado un departamento aparte centrado únicamente en la producción de vehículos eléctricos, y por otro, está trabajando con Mazda en nuevos sistemas de transmisión.
Asimismo, el fabricante japonés indicó que ha desarrollado un método para saber cómo actúan los iones de litio durante la carga y descarga, en tiempo real. Esto podría derivar en diseños que impidan que el material se desplace de forma despareja en electrolito y así se mejoraría la batería, según Yamashige.