
Como media gastamos en general alrededor de 2.000 euros al año en el mantenimiento de nuestro automóvil. La cifra se ve incrementada de forma importante si el parque familiar incluye varios vehículos. Pero siempre podemos reducir ese presupuesto siguiendo los consejos que detallamos a continuación.
1.- Se puede empezar a ahorrar desde la propia adquisición del vehículo. Infórmese bien en la prensa especializada de las constantes ofertas que disponen las marcas en sus lanzamientos de nuevos modelos o periódicamente para liquidar sus stocks. No dude en visitar varios concesionarios para contrastar los precios y encontrar las condiciones de compra más favorables.
2.- Contemple la posibilidad de recurrir a los vehículos de ocasión: la depreciación de un automóvil justo después de su matriculación puede rebajar hasta una cuarta parte su precio. Es posible encontrar unidades con muy pocos kilómetros a precios muy inferiores a los nuevos.
3.- Revenda pronto su coche. Al cabo de 3 a 5 años y con un kilometraje de 30.000 a 50.000 kilómetros es el momento donde más fácil le resultará venderlo y mejor precio conseguirá por él en el mercado de segunda mano.
4.- Ahorre en combustible. Es el mayor gasto del presupuesto general del mantenimiento de su vehículo. Montar neumáticos eficientes de baja resistencia a la rodadura y repostar en gasolineras que ofrezcan los mejores precios por el carburante puede alargar en más de 1.000 kilómetros al año el rendimiento del dinero destinado a combustible.
5.- Cambie sus hábitos de conducción. Practique una conducción eficiente evitando acelerones y bruscos frenazos. Utilice el control automático de velocidad de crucero en carretera y pare el motor en las detenciones de más de 3 minutos si su coche no dispone de parada automática del motor.
6.- Busque el seguro que mejores condiciones le ofrezca comparando ofertas de diferentes compañías. Si tiene moto, los hay que cubren ambos vehículos con una misma póliza. Negocie periódicamente con la compañía el precio del seguro. Si hay varios vehículos en la familia busque una misma aseguradora que le rebaje el precio total por todos ellos.
7.- No escatime en el mantenimiento. Aquí lo barato se hace caro, pues las averías derivadas de una falta de revisiones mecánicas suelen ser graves. Si no usa mucho el automóvil, guíese por el kilometraje. En general lo ideal es un control de niveles y piezas de desgaste anual y una completa revisión cada 30.000 kilómetros.
8.- Pida presupuestos en diferentes talleres. Existen muchas diferencias entre ellos y podrá ahorrar así también en el mantenimiento.
9.- Si tiene varios vehículos intente encontrar un taller de confianza que se encargue del mantenimiento de todos ellos y negocie para que le ofrezca mejores precios que si acude con ellos por separado.
10.- Contemple la posibilidad de compartir el coche ya sea en los desplazamientos cotidianos o en los viajes interurbanos. Compartir gastos ayudará a reducir drásticamente los costes anuales de mantenimiento. Si se decide por esta fórmula de uso de su automóvil, no estará de más comunicárselo al seguro para que se tenga en cuenta en las condiciones de su póliza.