
Apenas unas horas antes de que comience el Mundial de Fórmula 1 2016 en Australia, Aston Martin ha anunciado una alianza con Red Bull por la que Adrian Newey, a quien se considera el mejor diseñador de monoplazas de la historia, será el encargado de dar forma a un futuro supercoche de calle para la firma británica.
El proyecto, que se conoce internamente como AM-RB 001, está pensado para aunar en un mismo superdeportivo lo mejor de ambas empresas: por un lado, la aerodinámica y la avanzada tecnología que caracteriza a Red Bull; por otro, el siempre refinado y elegante diseño del fabricante británico. Newey, director técnico de la escudería Red Bull y principal responsable del éxito del equipo en la última década, colaborará codo con codo con el jefe de diseño de Aston Martin, Marek Reichman.
Como parte del acuerdo de colaboración, además, el logo de Aston Martin estará presente en el monoplaza de Red Bull, impreso en los pontones y en el frontal del RB11, lo cual supone el regreso, de alguna forma, de la firma a la categoría reina después de 55 años de ausencia.