
El Ayuntamiento de Madrid presentó ayer su plan para ubicar diez aparcamientos disuasorios en varios distritos en los alrededores de la M-40 con capacidad para unas 15.000 plazas en total, para lo que tiene prevista una inversión de 78 millones de euros en un periodo de dos años.
La propuesta presentada ayer, que es provisional, plantea instalar aparcamientos en Pitis, Fuente de la Mora, Canillejas, Estadio Olímpico, Santa Eugenia, San Cristóbal, Villaverde Alto, Cuatro Vientos, Aviación Española y Colonia Jardín.
No todos los aparcamientos se situarían sobre suelo municipal, por lo que el Ayuntamiento entabla conversaciones con el Ministerio de Defensa y Adif, propietarios de algunos de los terreros sobre los que se alzarían estos aparcamientos, entre ellos las parcelas de los antiguos cuarteles ubicados en la zona donde se preveía la construcción del plan Campamento.
La tarifa para dejar el coche estará bonificada y podría llegar a la gratuidad, sobre todo en los casos en que se acceda desde el aparcamiento al lugar de trabajo en transporte público, según ha explicado hoy en la rueda de prensa el director general de Gestión y Vigilancia de la Circulación, Francisco López de Carmona.
El uso no disuasorio del aparcamiento tendrá un coste igual al de las tarifas municipales, y para evitar el estacionamiento de vehículos vinculados a centros de trabajo de los alrededores, se podrán establecer recargos.
Además, el Ayuntamiento pretende estudiar la implantación de zonas del Servicio de Estacionamiento Regulado (SER) en las zonas aledañas con el objetivo de asegurar a los residentes su posibilidad de aparcar.
De los diez aparcamientos, siete serán en superficie, dos en altura y otra en "bajo rasante" por estar en un lugar destinado a zona verde; todos ellos estarán a unos 50 metros de la estación de metro o de las zonas de autobuses.
El Ayuntamiento de Madrid presentó el pasado 29 de enero este plan al Consorcio Regional de Transportes de Madrid, del que forman parte tanto la Comunidad como el Ministerio de Fomento, instituciones que "deberán coordinar la planificación de estas construcciones", según sostiene el Consistorio en una nota de prensa.
Renfe Cercanías y Adif son otros de los agentes a los que el Consistorio ha pedido opinión sobre su proyecto (las de Adif ya se están estudiando), y el Ayuntamiento abrirá además un periodo de información pública para que quienes lo consideren puedan hacer sus propuestas.
El Ayuntamiento considera que la mejor alternativa de aparcamiento disuasorio ante la congestión de tráfico en Madrid se encuentra fuera de la propia ciudad, por lo que apuesta por ubicarlos en el entorno de la M-40.