
Cuando el precio de la gasolina no resulta un problema para los ciudadanos se nota. Y si no que se lo digan a los habitantes de Dubái, que poseen la mayor concentración de automóviles per cápita del mundo.
En el transcurso de los ocho últimos años el parque rodante de la ciudad se ha duplicado y ya supera a las hasta ahora ciudades campeonas del automóvil como Nueva York, Londres o Hong Kong.
Los datos, publicados por el organismo oficial RTA -Autoridad de Carreteras y Transportes- ponen de relieve esta densidad récord de coches por habitante. Su imparable crecimiento, cifrado en un 8,2 por ciento anual, hace prever que, en 2020 se alcanzarían los 2,2 millones de coches en la ciudad del Golfo Pérsico. Esta cifra ya se aproximaría a la equiparación de automóviles con la población, que no crece en esas proporciones, dando el caso a un fenómeno urbano nunca visto.
En el momento actual, la proporción de coches por 1.000 habitantes es en Dubái de 540 coches, mucho mayor que las proporciones existentes en ciudades como Nueva York -305-, París -250-, Londres -213- o Hong Kong -63-.
El increíble desarrollo que ha experimentado Dubái en las últimas décadas ha aportado a sus ciudadanos innumerables ventajas occidentales, pero también nuevos inconvenientes como los kilométricos atascos que se producen en algunos de sus barrios y carreteras.