Tesla Model S y Google Glass, dos de los gadgets de los que más se está hablando en los últimos meses, se unen en una combinación que puede marcar el futuro de la conducción. El desarrollador Sahas Katta ha creado una aplicación para las gafas inteligentes que permite controlar un buen puñado de funciones del coche eléctrico de moda sin hacer uso de las manos. Así funcionan las Google Glass.
Desde ajustar la temperatura del habitáculo a abrir el techo solar, pasando por localizar la ubicación del coche en zonas de aglomeración mediante un mapa o gestionar la recarga del vehículo sin tener que acudir siquiera a él. Son sólo algunas de las posibilidades que ofrece GlassTesla, como ha sido bautizada la app para las gafas de Google, que ya ha despertado gran expectación entre geeks fanáticos de los nuevos dispositivos tecnológicos, por un lado, y los aficionados a la conducción, por otro, que ven en esta aplicación un futuro mundo de oportunidades al volante.
Incluso el propio vicepresidente senior de ingeniería en Google, Vic Gundotra, ha mostrado su fascinación por el invento. "Acabo de instalar esta aplicación. Es una locura increíble ser capaz de controlar el Tesla desde mis Google Glass", aseguraba Gundotra la pasada semana a través de su cuenta en la red social Google Plus.
¿El futuro de la conducción?
Las futuras aplicaciones que pudieran derivarse de las Google Glass en relación a los coches supondrían una nueva aportación del gigante de las búsquedas al mundo del automóvil,en el que ya se encuentra muy activo con el desarrollo de la tecnología necesaria para una conducción autónoma, por la que cualquier vehículo puede circular sin conductor sin incidentes. El propio Elon Musk, CEO de Tesla, ha reconocido ya su ambición de aliarse con la firma de Moutain View para hacer de sus vehículos el coche eléctrico 'inteligente' por excelencia.
En cualquier caso, la aplicación creada por Katta está aún en fase beta, pero las expectativas creadas son ya demasiado altas. ¿Hasta dónde puede llegar GlassTesla? ¿Sería posible ver el mapa del GPS enfrente de uno mismo mientras se encuentra al volante? ¿Quizás fotografiar a un vehículo infractor de alguna norma de tráfico? En definitiva, ¿podrá darse el caso de que sea posible conducir con las gafas sin que las distracciones sean suficientemente relevantes como para poner en peligro la seguridad?
En el siguiente vídeo (08:44, en inglés), el propio Sahas Katta muestra un ejemplo de cómo funciona su app GlassTesla a bordo de un Model S.