Economía/Motor.- Daimler reduce un 11% su beneficio trimestral y aplaza los objetivos que se había fijado para 2013

El grupo automovilístico alemán Daimler, propietario de Mercedes-Benz y Smart, ha revisado a la baja sus previsiones de ganancias para 2012 y ha aplazado los objetivos financieros fijados para 2013 como consecuencia de la situación económica, tras reducir un 11% su beneficio neto en el tercer trimestre del año.

STUTTGART (ALEMANIA), 25 (EUROPA PRESS)

En concreto, Daimler obtuvo un beneficio neto de 1.205 millones de euros entre julio y septiembre, un 11% menos, lo que sitúa las ganancias acumuladas en los nueve primeros meses en 4.136 millones, un 3% menos. El beneficio operativo (Ebit) bajó un 2% en el trimestre (1.921 millones) y un 4% en lo que va de año (6.294 millones).

La cifra de negocio de la empresa con sede en Stuttgart subió un 8% en el tercer trimestre, con 28.572 millones de euros, y un 9% en los nueve primeros meses, con 84.467 unidades. El consorcio acumula unas ventas en lo que va de año de 1,6 millones de vehículos, un 6% más, y espera superar en 2012 los 2,1 millones de vehículos comercializados en 2011.

El presidente de Daimler, Dieter Zetsche, calificó de "buenos" los resultados trimestrales, "teniendo en cuenta las significativamente más difíciles condiciones del mercado". Zetsche anunció que la empresa no cumplirá el objetivo de Ebit previsto para 2012 --que era igualar el de 2011--, aunque ofrecerá un beneficio operativo sólido del orden de 8.000 millones de euros.

AJUSTE DE PRODUCCIÓN Y EMPLEO.

Además, Zetsche anunció que la empresa no está en los niveles necesarios para cumplir los objetivos financieros que se había fijado para 2013. Daimler no renuncia a ellos, pero los aplaza, al tiempo que refuerza las medidas de ajuste de la producción ante las "desafiantes" perspectivas económicas.

La empresa asume que su plantilla crecerá este año respecto a 2011, toda vez que a 30 de septiembre contaba con 275.451 empleados, un 2% más. No obstante, advierte de que los ajustes de producción tendrán efecto sobre el empleo, lo que se gestionará recurriendo a mecanismos de flexibilidad y reduciendo el número de eventuales.