El todocamino grande de la estrella, en el mercado desde 2006, se ha renovado este año para adaptarse mejor al offroad, dada la proliferación de crossover más pequeños que se mueven mejor por el asfalto. Aunque Mercedes insiste en remarcar su doble carácter, todo en el nuevo Clase GL hace pensar que su sitio natural está fuera de la carretera. A finales de año, el renovado SUV alemán tendrá también su versión AMG de 557 CV.
El GL 2012 es más robusto que su predecesor, después de ganar cuatro centímetros en longitud y uno más en altura, dimensiones que -superiores al de un Land Rover- le otorgan una apariencia con un plus de poderío y carácter. Y aunque las apariencias puedan engañar, no es el caso, precisamente, de este SUV de gran tamaño.
Fuera... Y dentro del asfalto
Más allá de su look, el renovado Clase GL cuenta con un completo equipamiento destinado a satisfacer sin problema la conducción offroad, con elementos que viene de serie como su suspensión neumática AIRMATIC, el control de descenso en pendientes, un programa específico para conducir fuera del asfalto... Pero otra vez la marca de la estrella no quiere 'encasillar' su GL 2012 fuera del asfalto y, de forma opcional, se podrá añadir un paquete ON&OFFROAD, que facilita aún más la conducción por zonas sin asfaltar gracias a elementos como una reductora o un diferencial autoblocante.
Por otro lado, en el apartado mecánico, contará con dos versiones: un diésel GL 350 BlueTEC 4MATIC de 258 CV y un gasolina GL 500 4MATIC BlueEFFICIENCY de 408 CV, asociados ambos a una caja automática de siete velocidades. El consumo, que de primeras se espera desorbitado, es minimizado gracias a la inclusión de tecnologías ya conocidas como el sistema de parada y arranque automático, o la dirección asistida eléctrica, dentro del programa BlueEfficiency de Mercedes-Benz.
Equipamiento a la altura
Por dentro, el interior del nuevo Clase GL dispone de inserciones y detalles en distintas variantes de madera y aluminio que desprenden una mejora significativa en la calidad percibida de su habitáculo. El cuadro de mandos es más grande que en su predecesor, pero la reina absoluta es su pantalla a color de nada menos que 11,4'', desde la que se puede manejar cualquiera de las soluciones que contempla el completo sistema de infotenimiento.
Y, como no cabía esperar de otro modo, también el nuevo GL contará con las habituales tecnologías de asistencia al conductor, incluidas la mayoría en sus nuevos modelos más recientes; entre ellas, de serie, destacan sistemas como el de alerta por cansancio o el de prevención de colisión, función de servodirección inteligente -que ayuda al conductor con impulsos en el volante a reaccionar más rápidamente y con más acierto-... Además, incluirá también otras opciones como el servofreno de emergencia BAS PLUS o el freno PRE-SAFE con función autónoma de frenado.
Aún no hay fecha exacta de lanzamiento de la nueva Clase GL, pero Mercedes-Benz sí ha adelantado ya cuáles serán sus precios de salida llegado el momento: la versión diésel saldrá al mercado desde 84.340 euros, mientras que su homólogo de gasolina lo hará por 109.420 euros. La versión AMG, que saldrá en 2013, partirá desde los 150.320 euros.
GL 63 AMG: el todoterreno más radical
