Economía/Motor.- Chevrolet aspira a duplicar sus ventas en Europa en 2017, hasta alcanzar el millón de unidades

La firma automovilística Chevrolet, del grupo General Motors, tiene el objetivo de duplicar, hasta un total de un millón de unidades anuales, sus matriculaciones en el continente europeo en el horizonte de 2012 ó 2018, según el director de Ventas de la compañía en Europa, Cesare Prati.

FRANKFURT (ALEMANIA), 13 (EUROPA PRESS)

En declaraciones a Europa Press en el marco del Salón Internacional del Automóvil de Frankfurt, Prati explicó que su compañía se encuentra en la actualidad en un momento muy importante, ya que, además de celebrar su centenario, está inmersa en una fuerte ofensiva de producto, a través de la que lanzará siete nuevos modelos este ejercicio.

Gracias a la llegada de estos nuevos modelos, la corporación automovilística registrará al cierre del presente ejercicio un volumen récord de ventas de entre 520.000 y 530.000 unidades, lo que representa el doble de vehículos de los que comercializó la marca en 2004 en el continente europeo.

No obstante, Prati indicó que estas cifras se encuentran todavía alejadas de las contabilizadas por la marca Chevrolet en el resto del mundo, donde representa aproximadamente el 50% de las entregas del consorcio General Motors, que posee una cuota mundial del 11,5%.

Sin embargo, reconoció que hay que ser realistas con la actual situación de la marca, puesto que en la actualidad compite casi únicamente en el canal de particulares y afirmó que la intención de Chevrolet es crecer, pero siempre de una forma "sana".

El directivo de la firma estadounidense afirmó que, como parte de su estrategia de incremento mundial y europeo de ventas, la compañía lanzará también modelos 'icónicos', como el Camaro, el Corvette y el eléctrico de autonomía extendida Volt, en el que la firma tiene puestas muchas expectativas y cuyas ventas se iniciarán entre finales de 2011 y principios de 2012.

Para finalizar, el director de Ventas de Chevrolet en el continente europeo indicó que el terremoto de Japón tuvo un efecto reducido en las operaciones de General Motors en todo el mundo, aunque resaltó que fueron los proveedores los que más sufrieron esta catástrofe, especialmente en lo que se refiere a motorizaciones diésel para Europa.