
El grupo automovilístico alemán BMW ha cerrado los tres primeros trimestres del ejercicio con un beneficio neto de 10.207 millones de euros, lo que supone casi quintuplicar las ganancias obtenidas en el mismo periodo del año anterior.
La facturación del grupo entre enero y septiembre alcanzó los 82.831 millones de euros, un 19,1% más en tasa interanual. Asimismo, las ventas del consorcio, propietario de la marca homónima, Mini y Rolls-Royce, se incrementaron un 18% en tasa interanual, hasta los 1.932.224 vehículos.
En el tercer trimestre del año, el consorcio alemán tuvo un beneficio neto de 2.584 millones de euros, lo que supone un alza del 42,4% en tasa interanual.
La cifra de negocio del grupo entre julio y septiembre alcanzó los 27.471 millones de euros, un 4,5% más en comparación con el mismo periodo del ejercicio anterior. No obstante, las ventas del Grupo BMW en el tercer trimestre del año descendieron un 12,2% en tasa interanual, hasta las 593.177 unidades comercializadas.
En cuanto a las previsiones de cara al final de año, el Grupo BMW espera que el segmento del automóvil registre un sólido incremento interanual en las entregas de vehículos de las marcas BMW, MINI y Rolls-Royce.
A finales de septiembre revisó al alza sus pronósticos de margen de rentabilidad operativa en el segmento automovilístico en 2021 hasta entre el 9,5 y el 10,5 %, (anteriormente había previsto entre el 7 y 9 %).
Además, espera que el segmento de motocicletas registre un aumento significativo de las entregas gracias a la tendencia positiva del mercado. El margen de EBIT de esta división se situará en un rango objetivo de entre el 8 y el 10%.