
El expresidente del Grupo Volkswagen, Martin Winterkorn, abonará una indemnización de 11,2 millones de euros al consorcio automovilístico alemán por el escándalo de manipulación de emisiones, denominado dieselgate, que destapó la Agencia de Protección Ambiental (EPA) de Estados Unidos en 2015.
El acuerdo fue aprobado por el Consejo de Supervisión del Grupo Volkswagen, el máximo órgano de decisión del consorcio alemán y con él se zanja la denuncia que llevó a cabo el consorcio contra su expresidente. Asimismo, el exmiembro del Consejo de Dirección del Grupo y presidente del Consejo de Dirección de Audi, Rupert Stadler, abonará una indemnización de 4,1 millones de euros.
Los pagos se refieren a la investigación iniciada por el Consejo de Supervisión en octubre de 2015 sobre las causas de la crisis del diésel y sobre quién fue el responsable.
En última instancia, la junta resolvió en marzo presentar reclamaciones por daños y perjuicios contra Winterkorn y Stadler por incumplimiento de los deberes de cuidado bajo la ley de sociedades anónimas.
Por otro lado, el Grupo Volkswagen también ha llegado a un acuerdo sobre los pagos de compensación de su seguro de directivos a este respecto, tal y como ha reconocido en un comunicado. De esta manera, las aseguradoras pagarán un importe de 270 millones de euros.
El bufete de abogados Gleiss Lutz llevó a cabo una amplia revisión de las reclamaciones de responsabilidad en nombre de la Junta de Supervisión y presentó los resultados finales de su investigación a la junta en marzo. Fue, con mucho, la investigación más completa y compleja realizada en una empresa en la historia económica alemana.
Sobre el resultado de esta investigación, el Consejo de Supervisión ha concluido que Martin Winterkorn violó sus deberes de diligencia como expresidente del Consejo de Administración de Volkswagen al no aclarar, en el período comprendido entre el 27 de julio de 2015 en adelante, de forma exhaustiva y rápida las circunstancias detrás del uso de funciones de software ilegales en motores diésel TDI de 2,0 litros vendidos en el mercado norteamericano entre 2009 y 2015.
El expresidente Winterkorn tampoco se aseguró de que las preguntas formuladas por las autoridades estadounidenses en este contexto fueran respondidas de forma veraz, completa sin retraso, reconoce el Grupo Volkswagen.
Por su parte, el Consejo de Supervisión concluyó además que Rupert Stadler incumplió sus obligaciones de cuidado al no garantizar, en el periodo del 21 de septiembre de 2016 en adelante, que los motores diésel V-TDI de 3,0 litros y 4,2 litros desarrollados por Audi que se habían instalado en vehículos comercializados en la Unión Europea de Volkswagen, Audi y Porsche fueron investigados con respecto a funciones de software ilegales.
Además, el antiguo directivo de Porsche, Wolfgang Hatz, pagará al Grupo Volkswagen 1,5 millones de euros y otro antiguo directivo de Audi Stefan Knirsch, un millón de euros.
Nueva investigación
Por otro lado, la fiscalía de Berlín ha abierto una investigación por falso testimonio contra el expresidente del Grupo Volkswagen, Martin Winterkorn.
La fiscalía sostiene que el exdirectivo, de 74 años, hizo "afirmaciones falsas de forma consciente" en su declaración ante la comisión de investigación sobre el escándalo de las emisiones en enero de 2017.
En concreto, consideran que no dijo la verdad al ser interrogado sobre cuándo fue informado sobre el uso del software empleado para falsear las emisiones de los vehículos (con el objetivo de cumplir con los límites legales), un punto clave para determinar su responsabilidad en el multimillonario escándalo.