
Ya está aquí por fin la primera berlina de la firma francesa del Grupo Stellantis. El DS 9 compendia toda la filosofía de una marca que, lejos de seguir borreguilmente las modas del mercado, apuesta por un segmento que se adapta como anillo al dedo a su forma de ser.
La pandemia obligó a retrasar su presencia entre nosotros, pero ya está aquí por fin el DS 9, la primera berlina de una marca, antaño subsidiaria de Citroën y hoy con identidad propia, que parece perfecta para albergar un modelo de estas características, pleno de lujo, refinamiento y, por supuesto, altas tecnologías.
Aunque los dos primeros modelos de DS, el 3 y el 7 Crossback, están sin duda más "adaptados" a las necesidades del mercado (aunque bien podríamos sustituir ese "adaptados" por "a la moda de"), dos SUV de altas prestaciones con un toque de elegancia y refinamiento, el DS 9 bien podría haber sido el primer modelo de la firma francesa, hoy del Grupo Stellantis. Porque no hay segmento o subsegmento que luzca con más porte las características que definen a un modelo premium, o incluso podríamos decir que de lujo: materiales excelsos, líneas de diseño audaces, pero siempre dentro de una serenidad absoluta, las últimas tecnologías tanto dentro como fuera del capó. Y, por encima de todo, un sinfín de detalles, en el diseño exterior y en la atmósfera interior, que nos hacen "respirar" que estamos en un coche de muy alto segmento y estatus.
En palabras de la comunicación promocional del modelo, "el DS 9 es una berlina de tres cuerpos que adopta los códigos de estilo de DS Automobiles con un frontal potente y expresivo, dotado de una parrilla de calandra concebida con un diseño paramétrico con efecto de diamante tridimensional encuadrado por los emblemáticos DS Wings de la marca. La firma luminosa se caracteriza por la tecnología DS Active LED Vision con módulos giratorios a 180 grados, acentuados por las luces de día tipo Punto Perla. Sobre el capó hay una franja labrada con el acabado guilloché Clous de Paris. Es la primera vez que este distintivo interior, característico de las creaciones DS, se coloca en el exterior del habitáculo". Un resumen perfecto, con las palabras cuidadosamente seleccionadas, de lo que es la filosofía DS en general, y de este modelo, su primera berlina, en particular.
Lujo y espacio
En el interior, donde realmente se percibe en todo su esplendor el lujo y el refinamiento del DS 9, la comodidad era el objetivo principal de los diseñadores de la firma. Y como era de esperar, las batallas alargadas que han traído los últimos adelantos en diseño y tecnología, y que en el DS 9 llegan a casi los tres metros entre eje y eje, permiten ofrecer un enorme espacio en especial para las plazas traseras. No olvidemos que el DS 9 es ante todo una berlina de representación, y tanto o más importante es la comodidad de las plazas traseras como la de las delanteras.
En cuanto a las motorizaciones, en el momento de su lanzamiento el DS 9 ofrece dos alternativas: un motor de gasolina 1.6 que ofrece 224 CV y un híbrido enchufable (DS se "salta" la hibridación ligera, cosa que celebramos) de la misma potencia, con una autonomía en modo eléctrico de hasta 48 kilómetros, y que está llamado a ser el buque insignia del modelo. En unos meses llegarán otras dos versiones híbridas enchufables de 250 y 360 CV, esta última con tracción a las cuatro ruedas.
Y en lo que se refiere a la tecnología, la noticia no es que el DS 9 vaya equipado hasta las trancas en todos los sentidos, sino que adoleciera de la falta de algunos de los últimos sistemas de ayuda a la conducción. Hablamos por ejemplo del DS Active Scan Suspension (una cámara en lo alto del parabrisas que escanea la carretera y maneja las ruedas para lograr una marcha lo más segura posible); el DS Drive Assist permite al modelo alcanzar un nivel 2 de conducción autónoma; el DS Park Pilot busca sitios para aparcar circulando hasta 30 km/h, y un largo etcétera.
El DS 9 ya admite pedidos, y su precio oscila en su lanzamiento entre los 54.032 y los 57.531 euros.
Eléctrico, híbrido y sport
La tecnología siempre avanza varios pasos por delante del mercado, y por eso hoy, cuando la movilidad eléctrica es más que un hecho, y tras pasar de unos primeros modelos de calle es hoy parte importante de las marcas Premium, es habitual poder encontrar en un modelo como el DS 9 unos modos de conducción que antaño nos parecerían incompatibles, como Eléctrico, Híbrido y Sport.
Las versiones híbridas enchufables del DS 9 siempre arrancarán en modo eléctrico (siempre que su batería de 11,9 kWh de capacidad disponga de energía eléctrica), para que desde ese momento el conductor pueda elegir entre circular a kilovatio puro o en modo híbrido, en el que el coche gestiona automáticamente cuánta energía toma del motor atmosférico de gasolina y cuánta del eléctrico. Y luego, como buen modelo de altas prestaciones, podemos elegir el modo Sport, en el que el DS 9 exprime sus capacidades hasta las más altas cotas prestacionales.
Además, esta versión híbrida enchufable, que ya hemos dicho que será sin duda la más popular, dispone por supuesto de etiqueta ambiental CERO de la DGT.