El grupo automovilístico japonés Toyota Motor redujo su beneficio neto entre abril y diciembre, tres primeros trimestres de su año fiscal, un 14,1% en tasa interanual, hasta los 1,46 billones de yenes (11.577 millones de euros) debido al impacto de la pandemia de la Covid-19.
El beneficio operativo del grupo nipón en los tres primeros trimestres del año fue de 1,50 billones de yenes (11.891 millones de euros), lo que supone una caída del 26,1% en comparación con el mismo periodo del ejercicio precedente.
De otra parte, la facturación de gigante automovilístico fue de 19,5 billones de yenes (153.977 millones de euros), lo que supone un descenso del 15% en tasa interanual debido a la caída demanda en las ventas.
Entre abril y diciembre, la compañía nipona comercializó 5,43 millones de unidades en todo el mundo, un 20,7% menos en tasa interanual en comparación con los 6,85 millones de vehículos entregados en el mismo periodo del año anterior.
Previsiones
De cara al cierre del año fiscal, Toyota prevé que su beneficio neto caiga un 6,7% en tasa interanual, hasta los 1,9 billones de yenes (14.982 millones de euros).
Asimismo, el grupo nipón estima que su beneficio operativo se reducirá un 16,6% en tasa interanual, hasta los 2 billones de yenes (15.771 millones de euros).
En cuanto a la facturación, Toyota prevé cerrar el año fiscal con un total de 26,5 billones de yenes (208.961 millones de euros), lo que supondría un descenso del 11,3% en comparación con el ejercicio precedente.
En cuanto a las ventas, Toyota estima que acabará el año con un total de 7,6 millones de unidades comercializadas, lo que supondría una merma del 14,6% en tasa interanual.