El piloto español de Moto2, Marc Márquez, que no pudo terminar la prueba del Gran Premio de Malasia este domingo, ya que se fue al suelo del trazado de Sepang debido a la incesante lluvia, declaró al término de la prueba que lo positivo del fin de semana es que "quedan dos carreras" para que termine el Mundial y les sirve la ventaja que poseen sobre sus competidores.
"Lo positivo es que quedan dos carreras y sirve este margen de puntos que teníamos. Iba muy cómodo, muy bien, muy tranquilo. Ya en el entreno se me había dado bien en condiciones de agua", confesó en unas declaraciones concedidas a Telecinco, el de Cervera, que vio cómo se le escapaba la primera opción de alzarse campeón del Mundial de motociclismo.
La séptima posición en la que marchaba hasta la vuelta número trece, era válida para obtener el título, con mayor holgura si cabe con la posición retrasada de Pol Espargaró (Kalex). "Ha comenzado a llover más y sabía que patinaría más. Me lo he tomado con tranquilidad, pero iba prácticamente recto en la frenada y se me ha cerrado delante. no he podido hacer nada", afirmó sobre el incidente.
Su caída obligó a Espargaró a quedar por encima de la duodécima posición, para retrasar el alirón del líder del Mundial en una carrera que se suspendería por la lluvia. Lo hizo, por lo que Marc Márquez ya mira su siguiente cita, en el Gran Premio de Australia, donde sumar sólo dos puntos le harían campeón. "Ahora a pensar en Phillip Island la semana que viene y a ver qué pasa", concluyó.
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"Sorprendido" Marc Márquez