Fórmula 1

Las nuevas imágenes del accidente de Robert Kubica

Así quedó el coche de Kubica

Apenas 48 horas después de su accidente, Robert Kubica empieza a ser consciente de las consecuencias que pudo haberle provocado su loca pasión por los Rallies. El polaco de Renault-Lotus ya ha recobrado el conocimiento y hasta ha empezado a preguntar por las circunstancias de lo que le ocurrió a los mandos de su coche de carreras. Un pequeño Skoda que le salvó la vida dejándose buena parte de la carrocería en ello. Las nuevas imágenes sobre el suceso revelan cómo este ferviente admirador de Juan Pablo II se libró de la muerte por apenas unos centímetros.

Ya es la segunda vez que le ocurre. Aquello se vivió en directo. Fue durante el GP de Canadá en 2007. En la vuelta 24 su BMW perdió el control y terminó destrozando el chasis hasta quedar reducido al habitáculo de seguridad donde Kubica iba sentado.

Quizá es por ello por lo que en esta ocasión la sensación de peligro haya sido menor. Las imágenes sobre el accidente de Rally llegan a cuenta gotas y las instantáneas no eran tan espectaculares, hasta ahora.

La prensa italiana ha comenzado a destilar las primeras fotos de cómo quedó el minúsculo coche después del impacto. Lo más sorprendente es que la cabina del coche quedó casi intacta, toda vez que dos grandes secciones de guardarail se incrustaron tanto en la parte delantera como en la trasera del coche.

Así las cosas, si milagrosa fue la salvación del polaco, más todavía lo fue la de su compañero. Jacub Gerber, copiloto para este pequeño rally local italiano, logró salir por su propio pie del destrozado coche.

Fue él quién se ocupó de movilizar las primeras ayudas, entre ellas las de los primeros coches que llegaron tras el impacto.

Divergencias en su recuperación

Por ahora las fuentes varían su versión de los hechos. Mientras que desde Renault su director deportivo afirmó este lunes que quizá Kubica sólo necesite unos meses para volver a coger el volante de un Fórmula 1, los médicos prefieren ser más prudentes y siguen refugiándose en los mensajes de cautela poniendo su retorno a los circuitos a un año vista.

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