El euro ha logrado vencer los impulsos bajistas que a mitad de la sesión de ayer provocaban que se acercara peligrosamente al nivel de los 1,2750 dólares, un soporte que de perderse podría abrir las puertas a una ofensiva bajista. La divisa europea cotiza con ganancias y se acerca a los 1,30 dólares.
La moneda única (EURUSD) se ha movido en la sesión de hoy entre un máximo de 1,2937 y un mínimo de 1,2801. Después de caer durante todo el día, el euro se recuperó ayer y terminó la sesión con un alza del 0,24%.
Los analistas de Bolságora reiteran en Ecotrader la importancia de que el euro no pierda el soporte de los 1,2750 porque por de bajo "los bajistas podrían haber construido un patrón inesperadamente bajista desde finales de noviembre".
Planes de ayuda
El día ha estado marcado por el anuncio de algunos gobiernos y bancos centrales de ayudas a su economía y su sector financiero.
El banco central australiano ha rebajado de nuevo los tipos de interés. En concreto, el recorte fue de un punto, lo que deja el precio del dinero en el 3,25%, su valor más bajo de los últimos 45 años. Poco después, el Gobierno ha desvelado un segundo paquete de ayudas económicas por 42.000 millones de dólares australianos (más de 20.500 millones de euros).
El dólar australiano (USDAUD) se apreciaba frente a los principales cruces tras estas noticias y pone fin a tres días de perdidas consecutivas. La moneda ha llegado a depreciarse más de un 31% respecto a las divisas más importantes.
"El deterioro de las economías de sus principales socios comerciales, la fuerte caída de la cotización de las materias primas, unidos al descenso de la demanda domestica y el deterioro del sector inmobiliario, han provocado un descenso acusado de los tipos desde sus máximos de los últimos 12 años situados en el 7,25% hasta los niveles actuales del 3,25%", destacan los analistas de X-Trade Brokers para explicar la caída del dólar australiano.
El Banco de Japón (BoJ) también ha anunciado hoy un plan para comprar hasta un billón de yenes (8.700 millones de euros) en acciones de las instituciones financieras y estabilizar las plazas bursátiles.
Los esfuerzos de la autoridad japonesa para ayudar al sector financiero han permitido que el apetito por el riesgo se asome tímidamente en el mercado, lo que ha provocado la caída del yen frente a monedas como el euro (EURJPY).