Cuatro años después de que Unilever decidiera duplicar su tamaño al tiempo que reducía su impacto medioambiental y mejoraba la salud de millones de consumidores para lograr que en el horizonte de 2020 el 100 por cien de sus materias primas fueran de origen sostenible, la compañía puede presumir de estar acercándose a sus objetivos.
En el plano puramente económico, el gigante que preside Paul Polman ha incrementado en un 20 por ciento el tamaño de su negocio al pasar de una facturación de 40.000 millones de euros en 2010 a un nivel de ventas de 48.000 millones de euros en 2014.
Cuatro años que han sido los primeros del Plan Unilever para una Vida Sostenible que el grupo lanzó en 2010 con la filosofía de seguir haciendo más negocio sin renunciar a ser sostenible.
Ahora, cuatro años después de aquel desafío, los logros de Unilever no sólo se resumen al plano económico. También son cuantificables en cada uno de los pilares que forman parte de aquel plan: el de la salud y el bienestar; el del medio ambiente; y el de majorar la calidad de vida.
En el primero, Unilever sostiene que ha conseguido mejorar la salud y el bienestar de cerca de 400 millones de personas en el mundo (empezó con 52 millones) educando, por ejemplo, con campañas en escuelas de países tercermundistas para concienciar a los niños, desde bien pequeños, de la importancia de lavarse las manos antes de comer para no transmitirse enfermedades por bacterias que hayan podido acumular.
En el caso de España, los avances de Unilever logrados en el campo de la nutrición ya han llevado a la compañía a cumplir con algunos de los objetivos marcados para 2020 como la eliminación de las grasas trans en todos sus productos o la importante reducción de las grasas saturadas en margarinas.
Además, desde 2014 el 100 por cien de todos sus helados para niños contienen como máximo 110kcal por ración, y el 72 por ciento de su cartera de productos cumple con la normativa de los cinco gramos de sal al día.
Desde la puesta en marcha del Plan, Unilever España ha participado también muy activamente en la consecución de los objetivos globales a través de diversas iniciativas relacionadas con la mejora de la salud y el bienestar, el impacto medioambiental y la calidad de vida.
Es el caso de la creación del Día Nacional Contra el Colesterol cuyo objetivo es sensibilizar a toda la población acerca de la importancia del control del nivel de colesterol. Y es que, según sostiene Ana Palencia, directora de Comunicación y Responsable Europea de RSC de Unilever España, más del "50 por ciento de los españoles tiene el colesterol alto pero sólo un 25 por ciento lo sabe".
De ahí la importancia que tiene para Unilever seguir una alimentación variada y saludable y realizar ejercicio físico diario para reducir el peligro que el colesterol alto supone para los problemas cardiovasculares de los adultos en España, donde el grupo está desde 1948.
Otra de sus iniciativas ha sido la de Unilever Comparte, con la que mediante talleres de formación en escuelas se ha educado a más de 4000 niños en aspectos clave como la mejora de su autoestima, la alimentación saludable o la higiene bucal a través de talleres en centros escolares.
Asignatura pendiente
En lo que respecta al pilar del medio ambiente de su plan, Unilever (presente en 190 países) todavía tiene un largo camino por recorrer para alcanzar los objetivos marcados para 2020 -reducir a la mitad el impacto medioambiental derivado de la fabricación y el uso de sus productos- pese a que en estos últimos cuatro años ya ha conseguido limitar en un 12 por ciento sus residuos y en otro 2 por ciento el agua utilizada para la elaboración de sus productos.
Además, y también vinculado con el impacto en el medio ambiente, a nivel global Unilever ha conseguido aumentar hasta un 55 por ciento el número de materias primas que provienen de fuentes sostenibles. Un ejemplo de ello lo tenemos en España, donde Unilever puso en marcha el primer campo de agricultura sostenible a gran escala junto a uno de sus principales proveedores, Agraz, especializado en la producción de tomate en polvo.
Otra de las iniciativas destacadas de 2014 en impacto medioambiental ha sido la puesta en marcha del concurso El Gran Ahorro, que se ha llevado a cabo conjuntamente con el Ayuntamiento de Viladecans, ciudad dónde se encuentra la sede de la compañía, y que ha enseñado a 65 vecinos a ahorrar en sus facturas energéticas mediante consejos y sencillas medidas a aplicar en los hogares.
"Llevamos en nuestro ADN el crecimiento sostenible, y en estos últimos 4 años hemos podido observar cómo de positivo es este aspecto: a nivel empresarial, en la relación con nuestros consumidores y a la hora de buscar sinergias con otras organizaciones", resalta Ana Palencia.
Por último, en relación con la calidad de vida, a nivel global Unilever ha ayudado este último año a 800.000 pequeños agricultores a mejorar sus prácticas en agricultura y ha dado formación y apoyo a 238.000 mujeres, incluyendo 70.000 microempresarias en la India.
En España, Unilever ha seguido fomentando el apoyo a las familias sin recursos a través de sus caminatas solidarias; en la edición de 2014 consiguió recaudar más de 30.000 euros.
Unilever sostiene que las "marcas con propósito" son una tendencia y afirma que las que han iniciado el concepto de vida sostenible han logrado, en los últimos tres años, un crecimiento superior a la media.