También llamado capital circulante, es la parte del activo circulante que se financia con fondos a largo plazo. Es un dato positivo, en la medida en que indica que los activos líquidos de la empresa superan a las deudas que tiene a corto plazo. Puede calcularse como diferencia entre los recursos permanentes y el activo fijo de la empresa. Ver ACTIVO CIRCULANTE.
Origen: CNMV