Las primas a las energías renovables están sufriendo importantes revisiones en toda Europa. España ha aplicado nuevos impuestos a las plantas existentes y ha modificado la actualización de las primas con el IPC, lo que ha supuesto un duro golpe en sus cuentas. Países como Bulgaria o Estonia también están realizando intensivos recortes y todas las miradas se centran ahora en Alemania, donde se espera un ajuste importante.
Según los datos del estudio elaborado por la consultora IHS, España mantiene un nivel de apoyo a la energía eólica muy limitado, en comparación con el resto de Europa. Concretamente, en nuestro país se paga en estos momentos alrededor de 81 euros, lo que supone una de las cifras más bajas.
Tan sólo Eslovaquia, Irlanda, Bulgaria, Turquía, Dinamarca y Suecia están por debajo de España en el apoyo a esta tecnología, mientras que el resto de países mantiene pagos superiores como pueden ser los 82 euros de Francia, los 89 euros que se pagan en Alemania, los 101 euros del Reino Unido, los 127 euros de Italia o los 148 euros de Rumanía, que mantiene la retribución más elevada.
El apoyo a la energía eólica ha caído un 3 por ciento en toda Europa y en estos momentos sitúa la media de retribución en los 96 euros.
Según el estudio de IHS, los deprimidos precios del mercado mayorista y los recortes en la energía fotovoltaica y la eólica no han sido sustituidos por refuerzos de los incetivos de los parques eólicos offshore o de otras tecnologías.
La remuneración media en 2013 para los países que no han cancelado su esquema de apoyo a las renovables se estima en 149 euros por MWh. La fotovoltaica ha sido la tecnología que ha recibido un mayor golpe al haber caído un 23 por ciento la media de las primas hasta los 162 euros/ MWh.
La consultora además destaca que hay algunas tecnologías que están desapareciendo del catálogo de tecnologías, como por ejemplo, la termosolar en España que tiene su principal foco de crecimiento en Francia y en Italia.
Esta situación está provocando que un gran número de empresas tengan que hacer frente a recortes de empleo para poder ajustarse a la actual situación del mercado.
Rescate de la banca
El presidente de Unesa, Eduardo Montes, ha afirmado que el déficit de tarifa supone 28.000 millones de euros, una cantidad "próxima al rescate de la banca", por lo que representa "un problema financiero ya a nivel país". Montes, ha declarado que el Gobierno tiene un papel muy importante, y ha pedido al Ejecutivo "una cosa muy sensata", la puesta en marcha de una reforma eléctrica consensuada con Unesa, que representa la mayoría del sector.
Sobre el déficit de tarifa ha explicado que parte está titulizado por el Estado y otra parte está en el balance de la industria eléctrica, y ha añadido que el desfase se genera en los costes regulados, de ahí que el usuario esté "pagando menos de lo que se le está suministrando, y eso no es posible".